Investigadores en robótica de distintas instituciones del país consideraron positiva la nueva Ley General en Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación, aprobada por la Cámara de Diputados, en cuanto al manejo de los recursos. Sin embargo, también reconocen que hay incertidumbre sobre cómo se llevará a cabo y qué pasará con el programa de becas de estudio, pues en este país hay normas que suenan bien en el papel, pero no se cumplen en la práctica.
Entrevistados en el marco del XIV Torneo Mexicano de Robótica, organizado por la Federación Mexicana de Robótica, que se lleva a cabo en Xalapa, los académicos celebran la realización de este evento que se vuelve a llevar a cabo en México tras la pandemia, con la participación de 640 estudiantes de todo el país y 120 instituciones de educación superior.
Le damos el beneficio de la duda: Morales
Más que hablar de la desaparición del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), la nueva Ley General en Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación representa un cambio que habrá que ver cómo se lleva a la práctica, señaló Eduardo Morales Manzanares, investigador del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (Inaoe).
Refirió que la cultura y la ciencia en general son dos pilares fundamentales de la sociedad mexicana y se les debería de apoyar mucho más, lo cual no ha sucedido con ningún gobierno en este país. No obstante, advierte: “Hay algunos cambios que suenan bien en papel, pero que vamos a ver si se cumplen, porque una cosa es lo que se diga y otra que se lleven a cabo”.
Lo que más lamenta el especialista en robótica es que en dicha norma no se incluyera destinar un presupuesto de uno por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país a la ciencia y tecnología, “no estuvo, es una pena, pero ahora vamos a ver cómo se lleva a cabo”.
Incertidumbre por las becas
Sergio Hernández Méndez, investigador del Instituto de Investigaciones en Inteligencia Artificial de la Universidad Veracruzana (UV), confió en que la nueva ley continúe brindando apoyo a los estudiantes con sus becas de estudio.
Ejemplificó que un recorte en este rubro afectaría a prácticamente los 640 estudiantes que participan en este evento organizado en la capital veracruzana hasta este sábado.
“Todos los estudiantes que están aquí, al menos de nuestro Instituto, todos tienen beca, con ella se pueden mantener, pagar la renta, las comidas, gastos, transporte y participar en congresos y eventos fuera del estado, sin beca se quedaría congelado esto, no se podría mover nada”.
Preocupado reiteró que confían en que no haya recortes a las becas y se continúe con el apoyo a esta parte de la investigación en México, y reconoció que hay incertidumbre.
“Hay incertidumbre, no se tiene certeza de si va a haber un apoyo, si se va a incrementar el número de becas, o si se va a mantener o se aumente el tabulador de la beca, no sé, pero esperamos que no se afecte a los beneficiarios”.
Nueva ley de ciencia y tecnología, un avance: Ibarra
Como todo documento, la nueva Ley General en Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación tiene muchas cosas buenas y cojea en algunos temas, pero en general representa un avance, principalmente en el manejo de recursos, expuso Juan Manuel Ibarra, profesor investigador en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
En este sentido refiere que la propuesta contiene cosas muy interesantes para el financiamiento de la ciencia en México, específicamente las becas, cuyos recursos ahora se entregarán directamente a los estudiantes y antes se dirigían a los programas de posgrado.
“Los programas hacían lo que querían y veíamos cada aberración, veíamos gente que estaba con becas del Conacyt estudiando en programas patito en universidades que ni existen y eso ya se acabó”.
En cambio, asegura que ahora ese dinero se va a empezar a aplicar directamente a las instituciones de educación superior e investigación públicas, como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el IPN o las universidades estatales, “es un gran cambio”.
