Veracruz, Ver. – Vendedores ambulantes, dedicados a la venta de glorias y de raspados, intentaron reinstalarse en la zona del malecón de Veracruz por la mañana del viernes a más de tres semanas de que se les retiró de ese lugar.
Los comerciantes informales arribaron con sus triciclos y productos al malecón con el argumento de querer trabajar.
Sin embargo, las autoridades locales y policiacas se los impidieron, lo cual provocó su molestia.
Incluso, hubo vendedores ambulantes que arrojaron jarabes sobre policías municipales y personal de las direcciones de Comercio y Gobernación.
Los policías y personal municipal intentaron subir los triciclos a una grúa, pero los ambulantes se resistieron y lanzaron nuevamente jarabes sobre las personas, y se armó un zafarrancho, en le que resultaron detenidos dos de los vendedores.
Una mujer se subió a la grúa para intentar bajar los triciclos, logró tirar uno, pero se le impidió que hiciera lo propio con los demás.
Los directores de Comercio y Gobernación invitaron al diálogo a los vendedores de glorias y raspados, pero su respuesta fue negativa.
Ante tal situación, elementos de la Policía Naval y de la Secretaría de Seguridad Pública arribaron a la zona del malecón para reforzar a los uniformados presentes.
La calma regresó después de unos minutos. Los ambulantes cedieron y se retiraron de la calle Insurgentes Veracruzanos.
Las autoridades subieron los triciclos de los vendedores informales a las grúas y se los llevaron.
La banqueta y uno de los carriles de Insurgentes Veracruzanos quedaron pegajosos y manchados por los colores de los jarabes que los ambulantes arrojaron sobre las autoridades locales, pero acudieron trabajadores de Limpia Pública a tallar con jabón y agua.
