Los terrenos cercanos a la cuenca del río La Antigua han cambiado su función agrícola y han sido transformados para uso urbano, advirtió la representante de la organización Senderos y Encuentros para un Desarrollo Autónomo Sustentable (Sendas), Georgina Vidriales Chan.
Informó que la organización ha observado los cambios en esta cuenca y las presiones que enfrenta que van desde el cambio de cultivos de maíz a papa, hasta la eliminación de los cultivos.
Explicó que en aún se investiga el impacto que van a tener sobre los cuerpos de agua el desplazamiento de cultivos de maíz a papa con el uso de agrotóxicos.
“Si bien estamos haciendo estudios, no sabemos exactamente el impacto que estos vayan a tener sobre nuestras fuentes de agua, pero están impactando a comunidades desde hace ocho años, la calidad de su aire, su agua, sus alimentos”.
Añadió que otro impacto es el crecimiento de la zona urbana pues está transformando la cuenca del Pixquiac y transformando territorios de producción a campestres o urbanos.
Advirtió la importancia de esta cuenca pues desde sus bosques en el Cofre de Perote se abastece el 38 por ciento del agua para la ciudad de Xalapa.
Ante ello, la activista recordó que Sendas ha trabajado en una propuesta intervención concebida desde 2005 que consiste en la conservación de bosques, implica generar mecanismos financieros para el cuidado de los bosques de la cuenca del río Pixquiac.
“Hemos logrado tener mil 500 hectáreas de conservación, que son prioritarias para el abasto de agua de Xalapa. Hemos estado estableciendo otros modelos de financiamiento para la conservación de bosques en torno a todo el Cofre de Perote con 10 ejidos forestales”.
También han desarrollado un monitoreo de conservación para saber qué es lo que está pasando en las áreas conservadas y también de calidad del agua.
“Tenemos un proyecto de monitoreo de calidad del agua muy primario y en los últimos años hemos hecho uno más preciso para saber qué otras sustancias puede haber en el agua u otra área de trabajo”.
Dijo que el programa de compensación por servicios ambientales de Xalapa inició en 2007 y hay una aportación económica a la gente que tiene estas mil 500 hectáreas de conservación de bosques para el cuidado.
“Se le dan cerca de mil 500 pesos por hectárea al año, cuando un papero renta por 20 mil pesos la hectárea. Este programa ha sido exitoso y se ha mantenido durante 18 años al grado que ya es un programa adoptado por la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento de Xalapa”.
Ecologista Universal pide poner alto a la contaminación de mares
En el Día Mundial del Agua el Luchador Ecologista Universal hizo un llamado a los tres niveles de gobierno y a las empresas transnacionales que paren los saqueos del líquido vital para industrializarlo, ponerlo en envases y después venderlo a costos altos a las familias.
Refirió que desde los años 90, los ecologistas han luchado para que las autoridades valoren los servicios que brindan los bosques, arroyos, manantiales y ríos, “acuérdense, gota a gota el agua se agota, eso lo decíamos antes, ahora ya no hay agua, ya se agotó”.
El Luchador Ecologista lamentó que los arroyos y mantos freáticos cada vez se contaminan más con las descargas de aguas residuales provenientes de casas, a causa de que los ayuntamientos hacen obras de drenajes y enfilan los desechos a estos cuerpos de agua.
El Ecologista anunció que el próximo lunes 25 de marzo a las 10:00 horas partirá del centro de Xalapa hacia la Central Nucleoeléctrica Laguna Verde (CNLV), ubicada en el municipio de Alto Lucero, para hacer conciencia una vez más del peligro que representan esta industria de energía.
“Es un peligro latente el que representan las plantas nucleares en cualquier parte del mundo, cualquiera sabe que una planta nuclear es una bomba de tiempo, no sabemos ni cómo, ni cuándo, ni en qué condiciones opera”, fustigó.
Pese a los avances de la ciencia, los científicos aún no saben qué hacer o hacía dónde dirigir los desechos nucleares, “esto es peligrosísimo. La gente cree que porque estamos en la ciudad no pasa nada, pero sí pasa”.
Argumentó que los gobiernos invierten cada año millones de pesos en la CNLV, sin que haya transparencia en el uso de los recursos y sin que mejoren los precios del costo de la energía para las familias veracruzanas.
“Es una corrupción tremenda, es un barril sin fondo, es un lugar en el que mucha gente se ha vuelto multimillonaria, no somos independientes, dependemos de Estados Unidos mientras estén los reactores nucleares, es un riesgo muy alto para el 3 por ciento de la energía nacional”, dijo.
Finalmente invitó a las y los ciudadanos a sumarse a la defensa del agua y del medio ambiente, con el propósito de exigir a los gobiernos que clausuren la planta nuclear de Laguna Verde.
“Hay accidentes en la planta, el año pasado hubo de 6 a 7 paros automáticos de la Laguna Verde, los han callado para que la gente de la zona esté pacífica, pero nos enteramos por empresas y periódicos de España”, finalizó.
