El dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Adolfo Ramírez Arana, afirmó que las renuncias de militantes como la de la diputada Anilú Íngram Vallines benefician a su partido pues consideró que “los malos priístas” ya dejaron el partido y que se quedan “los buenos”, por lo que calificó como positiva la decisión de la legisladora de abandonar su militancia tras 20 años de pertenecer a las filas del PRI.
Ramírez Arana así se refirió de manera general a las renuncias de 800 priístas que se dio a conocer el 21 de noviembre que acusaban que había desacuerdos políticos con el líder nacional Alejandro Moreno. El dirigente estatal dijo que algunos priístas están “etiquetados” y que por ello no los aceptan en la bancada de Morena, en alusión a la decisión de Ingram Vallines de declararse como diputada independiente.
Cabe destacar que la expriísta se sumará a la Alianza Progresista para apoyar la candidatura presidencial de la morenista Claudia Sheinbaum.