Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, dijo en referencia a Xóchitl Gálvez, aspirante a representar al frente opositor, que las élites opositoras ya se pusieron de acuerdo para elegir a una candidata que sepa robar.
“Si no cómo la iban a poner, está muy acreditado que sabe robar ¿Cómo le hizo en (la delegación) Miguel Hidalgo?, pues muy fácil: le daba permisos de construcción, de desarrollos inmobiliarios a cambio de que contrataran a su empresa y la de su marido. Imagínense, nada más en su desarrollo inmobiliario contrataron a su empresa por 70 millones de pesos”, aseveró.
Al encabezar asambleas de credencialización de “Defensores de la Cuarta Transformación” en las alcaldías Azcapotzalco y Miguel Hidalgo, con una meta de un millón de personas inscritas, el presidente nacional de Morena destacó que el partido tiene que estar organizado para refrendar en 2024 su triunfo en la Ciudad de México, así como la Presidencia de la República.
Por ello deben salir a las calles a buscar a convencer a más gente, porque la victoria nunca es definitiva, es decir, el presidente López Obrador no los invitó a ganar una elección sino a forjar la cuarta transformación. “¿Dónde va a ganar la derecha?, en aquellas casas donde nosotros no toquemos la puerta. ¿A quien va a querer convencer con sus campañas negras?, a aquellas personas que nosotros no invitemos al movimiento”.
Luego se refirió a la senadora Gálvez y reiteró que hacia el año entrante solo hay dos opciones: o sigue la transformación y el gobierno del pueblo y para el pueblo, o regresa la corrupción y los privilegios.
Más adelante, en entrevista, Delgado recalcó lo dicho en torno a la exdelegada en Miguel Hidalgo, postulada por el PAN, así como las denuncias de ella en contra del presidente López Obrador.
“Lo que pasa es que ya no le gustó que estén saliendo sus trapitos al sol, evidentemente ya fue seleccionada porque tenía habilidades para robar y pues ya está saliendo su modus operandi, cómo autorizaba desarrollos inmobiliarios a cambio de que contrataran a su empresa, es un modo de moche un poquito más sofisticado, pero finalmente es corrupción, es tráfico de influencias, es una nueva modalidad del moche que ahora ya se le conoce como el ‘móchitl’”.
También reprochó que tanto ella como Santiago Creel no hayan renunciado a sus cargos como legisladores, para contender por la representación del frente opositor, al tiempo que el INE enfila “un acto de censura” contra el presidente de la República. Sobre el proceso morenista pidió unidad, que no se exalten los ánimos, “cada quien puede apoyar a su corcholata favorita sin agredir a los demás”, dijo.
