Nogales, Ver.- Los incendios forestales que se padecen en región Altas Montañas, hasta la noche de este lunes, arrasaron con más de 250 hectáreas de bosques, media docena de casas, la evacuación de comunidades de montaña; y aunque no hay reporte de lesionados, ni fallecidos, sí bastante cansancio de brigadistas que intentan sofocar grandes llamas que encontraron el campo propicio para extenderse rápidamente: una extensa resequedad en los cerros, dos días con temperaturas mayores a los 32 grados y rachas de viento de hasta 70 kilómetros por hora.
Los pasados dos días en los municipios de Nogales, Huiloapan, Maltrata y Ciudad Mendoza han sido sumamente difíciles pues cuando se piensa que las llamas van a extinguirse, de nuevo y por las rachas de viento se reavivan con más fuerza. Ese escenario se vive especialmente en las congregaciones de Palo Verde, El Nicho y Chicahuaxtla, en donde este lunes por la mañana todo indicaba que los incendios cesaban y pronto se apagarían, pero la surada, típica de esta época del año, no sólo los reavivó, sino que los fortaleció para que arrasaran con extensos campos, secos, de flora, e incineraron a la fauna silvestre que habitaba en la zona.
El transitar del domingo al lunes fue muy complicado para todos. Las familias de esas tres comunidades no atendían el llamado del ayuntamiento a desalojar sus viviendas pues los pronósticos anunciaban que, en cuestión de horas, el fuego llegaría a sus viviendas. El llamado fue escuchado sólo por unos cuantos que se alojaron en las agencias municipales, mientras que los demás durmieron o por lo menos lo intentaron hacer al interior de sus viviendas, construidas, la mayoría a base de madera.
Este lunes amaneció con la posibilidad de que las llamas fueran sofocadas por los cientos de brigadistas que por casi 24 horas luchaban en contra de ellas, sin embargo, una surada, con rachas de viento de hasta 70 kilómetros por hora, terminaron con la posibilidad y casi de inmediato las extendieron al grado de que lo avanzado en la extinción de pronto se perdió.
Esta vez no hubo mano blanda. La autoridad ordenó el desalojo de las comunidades, prácticamente cercada por las llamas y a bordo de unidades oficiales y camionetas particulares sacaron a todos los que habitan en esas comunidades, máxime que al menos seis casas fueron consumidas por el incendio. La orden fue acatada y pasadas las 8 de la noche ya no había nadie, al menos visible, en las comunidades.
En tanto, ciento de brigadistas, oficiales y voluntarios hacían brechas cortafuego, e intentaban aminorar la velocidad con la que el incendio se propagaba, pero hasta la noche de este lunes no lo lograron.
Nogales no fue el único municipio afectado. En Huiloapan, el cerro El Gentil fue presa fácil de otro incendio que se inició, también, el domingo por la tarde. Ahí la situación fue diferente, pues al ser un municipio pequeño, como su presupuesto, no tenía ni los suficientes brigadistas ni tampoco el material para atender el combate al incendio.
El viento igual obró en su contra, pues las rachas prontamente extendieron las llamas hasta hacerlas visibles en un radio superior a los 8 kilómetros. La noche del domingo y madrugada del lunes fue muy pesada para sus habitantes. El temor de que el incendio “bajara” a la cabecera municipal, cada vez era mayor. Sin embargo, la solidaridad de personas ajenas a la municipalidad hizo que se sumaran los esfuerzos y en cuestión de horas, decenas de brigadistas ascendieron al cerro para dar batalla al incendio que, pese a los esfuerzos, les ganaba terreno.
La aparición de helicópteros contra incendios forestales, de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) esperanzó a los habitantes, pero la ayuda fue insuficiente pues las llamas en poco disminuyeron. Cerca de las 9 de la noche de este lunes, los brigadistas se dieron por vencidos y de a poco empezaron a descender agobiados por el calor, pero además casi deshidratados y con muy poca alimentación.
En otro de los frentes, en Maltrata, tienen una gran ventaja. El incendio que se encuentra en la entrada del municipio no tiene cercanía con ningún núcleo poblacional y eso ya es ventaja; su extinción no es prioritaria, al menos eso parecía, pues no hay brigadas que intenten sofocarlo, pese a su amenazante cercanía con la autopista Orizaba-Puebla, tramo Cumbre de Maltrata.
El escenario climático para este martes no dista mucho de los dos pasados: elevada temperatura y rachas de viento que, aunque ya no serán intensas, sí tendrán la fuerza para impulsar el crecimiento de los incendios que siguen sin ser apagados. Los daños en el medio ambiente hasta el momento no están cuantificados, es un hecho que hay zonas de bosque incineradas, pero además decenas de animales silvestres que murieron quemados.
Incendios controlados
En tanto, Guadalupe Osorno Maldonado, secretaria de Protección Civil (PC), supervisó y coordinó las labores de sofocación, brevemente explicó que el gobierno de Veracruz da seguimiento al incendio forestal en la región Altas Montañas y reubicó el puesto de comando a las instalaciones del Sector Ductos Mendoza de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Desde allí, expuso, “se coordina la operación en dos zonas de atención: el valle de Orizaba, donde se combate el incendio del paraje aserradero en Maltrata, con 45 por ciento de control y 35 por ciento de liquidación; y el cerro El Gentil en Huiloapan de Cuauhtémoc, con 10 por ciento de control y actividades como descargas aéreas de agua y sobrevuelos de valoración”.
Asimismo, señaló, “la segunda zona de atención corresponde a la sierra de Zongolica, que atiende los incendios en Axoxohuila, Soledad Atzompa, 90 por ciento de control y 70 por ciento de liquidación y en la Reserva Ecológica en San Juan Texhuacan con 95 por ciento de control y 30 por ciento de liquidación.
Además, agregó, “se insta a no acercarse a las zonas de incendio y a evacuar si se recomienda por seguridad, de igual manera la reiteración a seguir sólo los informes oficiales. Hasta el momento, se contabilizan siete incendios atendidos por fuerzas estatales y federales, además de brigadas comunitarias y unidades municipales de Protección Civil.
Humo provoca enfermedades respiratorias
Por su parte la delegación Veracruz Sur del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), hizo recomendaciones para el cuidado de la salud de la población del valle de Orizaba ante la llegada del humo y cenizas provocadas por los incendios.
De hecho, se da a conocer que “debido a la contaminación ambiental se puede padecer irritación en los ojos y goteo nasal, hasta enfermedades cardíacas y pulmonares crónicas. El Instituto Mexicano del Seguro Social en Veracruz Sur exhorta a la población en general a extremar precauciones ante la contaminación ambiental provocada por los incendios forestales”.
En un comunicado, igual se precisa, “que el humo que se está generando contiene una mezcla de gases y partículas finas que se producen cuando se queman materiales orgánicos. El peligro radica en estar expuesto por tiempo prolongado y respirar el humo o gases, ya que puede ocasionar diversas enfermedades que van desde irritación en los ojos y goteo nasal, hasta enfermedades cardíacas y pulmonares crónicas”.
En ese sentido, se recomienda “mantener puertas y ventanas cerradas, así como mantener limpias superficies y pisos para reducir el polvo y partículas en las casas y centros de trabajo, además de evitar en la medida de lo posible actividades físicas o deportivas al aire libre. Se debe tener especial cuidado en niños, niñas, embarazadas y adultos mayores, y más aún si se trata de una persona que padece una enfermedad cardíaca o pulmonar, como insuficiencia cardíaca, angina de pecho, enfermedad cardíaca isquémica, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfisema o asma”.
Además, se recomienda “estar alerta y, en caso de sufrir dificultad para respirar, dolor en el pecho, cabeza, irritación y/o pérdida de la consciencia, acudir de manera inmediata al médico, igual se hace el exhorto a la población a atender todas las recomendaciones que emitan las autoridades de Protección Civil”.
