A causa de la pandemia del coronavirus, ciudadanos perdieron sus empleos y se convirtieron en microempresarios, los cuales debe ser incorporados al régimen fiscal, opinó el presidente del Consejo Empresarial Metropolitano, Fernando Arana Watty.
Comentó que los últimos tres años han sido complicados para los gobiernos y los ciudadanos por la baja economía que se presentó en 2020 y 2021 causada por el cierre de empresas que ofrecían servicios o comercializaban productos.
Refirió que en la pandemia los desempleados crearon negocios con venta de pasteles, gelatinas, joyería, ropa, y artesanías, entre otros artículos, de los cuales algunos negocios crecieron y ahora tienen la capacidad de dar empleos y también deberían de pagar impuestos.
Los empresarios le apuestan a que el próximo año se haya una mejor recaudación de impuestos y esto sería posible al formalizar el comercio ambulante en calles, y las ventas que se ofrecen a través de redes sociales y las entregas de mercancías que se hacen a domicilio.
“Muchos mexicanos hicieron un esfuerzo por volverse empresarios o microempresarios vendiendo lo que fuera necesario porque fue una época muy complicada. Cerraron muchas empresas, no había trabajo y había que vivir. Pero ya pasaron la pandemia, muchos se quedaron con esta forma de vida que no está mal, pero sigue siendo comercio informal”, recalcó.
Además, agregó que en la informalidad, las empresas de reciente creación que venden por Internet han contratado empleados a los que no les otorgan las prestaciones laborales como los servicios de salud y la jubilación a través del IMSS.
“Cuando la gente informal vaya envejeciendo se van a dar cuenta que sí era necesario ser formal por todos los beneficios que te dan las prestaciones. Esperemos que la gente se vuelva formal. Duele pagar impuestos, pero si todos pagáramos impuestos a lo mejor habría menos cobros, porque habría mayor volumen de contribuyentes”, concluyó.
