Debido al intenso frío del norte, miles de pelícanos blancos emigran de Canadá y Estados Unidos a México, cuya estancia dura comienza en noviembre y termina en primavera. Estas aves, atraídas por clima y por el festín de pescado, llegan a Petatán, Michoacán.
Esta majestuosa ave blanca puede alcanzar los dos metros con sus alas extendidas. Posee un hermoso plumaje blanco rematado con plumas negras en la parte final de sus alas, cuenta con largas patas de color naranja, un saco del mismo color debajo de su pico y un graznido peculiar.
Estas aves migratorias que al igual que las mariposas, realizan una travesía para refugiarse del frío invierno, esta es otra maravilla natural más que tiene Michoacán. El pelicano borregón forma parte de los 3 fenómenos migratorios; Mariposa Monarca y tortugas.
De acuerdo a registros históricos proporcionados por la Secretaria de Medio Ambiente, Cambio Climático y Recursos Naturales, anualmente llegan a los lagos de Michoacán alrededor de 20 mil pelícanos.
Estos pelícanos que viven en lagos de agua dulce, son originarios de Groenlandia, Columbia Británica, Alberta, Manitoba y Ontario Canadá, desde allá viajan a lugares más cálidos, hibernando desde La Florida hasta Guatemala en las Costas del Golfo de México y en cuerpos de agua continentales de México como el lago de Yuriria, Cuitzeo y Chapala, para lo cual ejecutan distancias de vuelo promedio de tres mil 800 kilómetros, a una altura de hasta tres mil metros, recorriendo distancias de 500 kilómetros al día.
La comunidad de Petatán, compuesta por 900 habitantes, en su gran mayoría por pescadores y agradece la llegada de estas hermosas aves, pues afirman que ya hace “varios años” que el pelícano borregón ha vuelto el lugar más conocido y “turístico”.
