La diputada presidenta de la Mesa Directiva del Congreso local, Margarita Corro, afirmó que hubo negligencia por parte del departamento de Sanidad Animal del Ayuntamiento de Emiliano Zapata en el caso de los 16 caballos que eran explotados y sufrían maltrato en el Club Equestrian Mover.
Indicó que varios de estos animales padecen desnutrición y que su condición ya había sido denunciada a las autoridades municipales y no se dio seguimiento adecuado, por lo que comentó que se trató de un actuar negligente.
La diputada agregó que ya fue interpuesta la denuncia penal por estos hechos y que hubo una confusión, porque si bien la influencer Elena Larrea promovió la denuncia ante la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales y Contra los Animales (Fedayca), correspondía hacerla a la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente (PMA).
Sobre la querella, señaló que no hay un tiempo estimado para que a raíz de ella se pueda otorgar el resguardo permanente de los caballos a Elena Larrea.
Indicó que en el caso del caballo Winner se le practicaron ultrasonido y radiografías para ver si todavía tenía parte del globo ocular y comenzó el tratamiento.
Y ante el llamado de Elena Larrea en torno a la donación de alimento para estos ejemplares, dijo que llevaría su donativo este mismo sábado.
Winner, en recuperación
Winner, uno de los 16 ejemplares rescatados del Club Equestrian Mover, ubicado en el municipio de Emiliano Zapata, ya recibió atención médica, señaló la encargada del santuario de caballos Cuacolandia, Elena Larrea.
La activista indicó que actualmente los equinos se encuentran en el rancho-hotel Agua Bendita, en el municipio de Xico, y están en espera de que la Fedayca otorgue el resguardo permanente de los 16 ejemplares rescatados.
En el caso de Winner, el caballo al que le fue extirpado un ojo en condiciones poco salubres, se dio a conocer que fue trasladado a la clínica de la Facultad de Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Veracruzana (UV). “Winner lo logró. Ya está fuera de peligro y en recuperación. Unas semanas (de cuidados) y lo recibimos en Cuacolandia”, escribió a través de sus redes sociales.
Se dio a conocer que este ejemplar presenta desnutrición severa por lo que el tratamiento médico tuvo que hacerse con anestesia local. Sin embargo, continúan a la espera de que la Fedayca pueda entregarle el resguardo permanente a Elena Larrea a fin de que puedan ser trasladados al santuario que administra en el municipio de Atlixco, en Puebla.
Ante los gastos por la estadía de Elena y los animales en el rancho de Xico, la influencer solicitó el apoyo de la población para hacer donaciones o bien suscribirse a su cuenta de Only Fans con un descuento. Por su parte, Rafael Bravo, el presidente de la organización Regalemos un Paraizoo, urgió a la Fedayca a que entregue el resguardo permanente. “Esta no es una victoria hasta que los equinos no estén en Cuacolandia”, dijo.
Afirmó que la Fiscalía especializada ha sido negligente en cumplir con sus atribuciones y demandó acción legal contra quienes permitieron el maltrato a estos animales. Y recordó que el club hípico ya había sido clausurado por la Procuraduría Estatal de Proteción al Medio Ambiente (PMA) y aún así continuó operando e incluso vendió a uno de los caballos, aunque logró ser rescatado.
Hay que recordar que el martes pasado la PMA inspeccionó el Club Equestrian Mover, tras la denuncia de Elena Larrea, fundadora del santuario Cuacolandia. Esa noche los caballos fueron asegurados y entregados a la influencer, aunque por ahora no puede sacarlos del estado.
Previamente, Elena Larrea, que financia su labor a través de las ganancias que obtiene de Only Fans, señaló que el domingo pasado acudió a este espacio y encontró a equinos comiendo su excremento, con severa desnutrición e incluso señales de maltrato físico
Comentó que al acudir el lunes a la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales y Contra los Animales a presentar la denuncia no se la recibieron argumentando que correspondía a la PMA, que narró que el 30 de agosto acudió personal de la Procuraduría del Medio Ambiente a imponer unos sellos de clausura, por contravenir la legislación ambiental, pero que no rescataron a los animales.