El doctor Cluni Rafael Aguilar Lendechy advirtió que el consumo de drogas es un problema sanitario que se incrementa exponencialmente a través de los años en hombres y mujeres de cualquier edad, incluso menores, con perjuicios a las familias y sociedad, causando desintegración, pérdidas económicas, accidentes domésticos y de tránsito, violencia sexual, robos y muertes.
Refirió que al año por consumo y sobredosis mueren medio millón de personas en el mundo, en tanto que en México son 3 mil 500.
Destacó que en nuestro país hay mil 730 anexos que atienden la drogadicción, de estos sólo 26 por ciento (450) están reconocidos por la Comisión Nacional Contra las Adicciones (Conadic), los demás se administran sin protocolos, sin personal profesional, sin reglamentos y con costos que van de los 3 mil pesos mensuales hasta cobros de 200 mil pesos por tratamiento en clínicas de rehabilitación.
Mencionó que 6 por ciento de la población del mundo de entre 15 y 64 años consume droga, mismo porcentaje que tiene México; la oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito reveló que nuestro país ocupa el tercer lugar mundial en producción de opio.
“México es el último lugar en inversión y gastos en salud entre los países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), pues en tanto que destina 5.5 por ciento del producto interno bruto (PIB) a este rubro, los países de la OCDE aplican 9.2 por ciento. De este muy poco gasto que el país presupuesta para la salud sólo 1.3 por ciento se ocupa para salud mental y adicciones, cuando la Nueva Agenda para la Salud Mental en las Américas (NASMA) ha recomendado la aplicación de entre 5 y 10 por ciento.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la aplicación del 6 por ciento para prevención y tratamiento de adiciones, añadió.
Manifestó que en Veracruz se ha incrementado el consumo de drogas significativamente, lo que es un reflejo de que México hay poco gasto e inversión, sin vigilancia, control y aplicación de la Normatividad NOM-028-SSA2-2009 para prevención, tratamiento y control de adicciones.
Ante este panorama, consideró por último que es urgente tener programas efectivos para prevenir el consumo de estupefacientes. En la actualidad hay tratamientos eficientes con los que es posible disminuir la drogodependencia, evitar muertes y delincuencia por el uso de psicoadictivos, capacitando al recurso humano del Sector Salud. También regular y supervisar los anexos y centros de rehabilitación.
“Sólo falta conciencia, actitud y compromiso con un problema de salud que causa muertes y dolor en las familias y la sociedad”, concluyó.
