La vocera del Grupo Multisectorial VIH-Sida, Patricia Ponce, advirtió que pese a que el secretario de Salud, Gerardo Díaz Morales, presumió que en Veracruz más de 10 mil personas con el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) están en tratamiento, la entidad se ubica en el primer lugar a nivel nacional en mortalidad por sida.
Luego de que el funcionario afirmó que “95 por ciento” de las personas con VIH están bajo tratamiento “puntual y ordenadamente” durante su comparecencia ante los diputados locales con motivo de la Glosa del Cuarto Informe, la activista señaló que el mal manejo de la atención durante la pandemia ha ocasionado que el estado el de mayor número de defunciones por sida, con cerca de 700.
“Durante el 2020 y 2021 Veracruz se ubicó en primer lugar a nivel nacional en cuanto a mortalidad relacionadas con el sida, con cerca de 700 defunciones porque no se les dio atención a los nuevos ni a las 10 mil 325 personas registradas. Pueden decir que fue por el covid-19, pero durante el segundo año siguieron aplicando la misma estrategia”.
Por ello, insistió en que el secretario “tiene mal la información”, pues los datos son arrojados por el Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/sida (Censida), que además advierte que se tienen registrados 32 mil 380 personas con VIH desde 1983 hasta el 2021.
Patricia Ponce indicó que tan solo en 2022 se identificaron 261 casos nuevos de personas con VIH y que en general hay una falta de atención integral a lo largo de dos años de epidemia.
Acusó que durante la pandemia los Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención en Sida e Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits) se convirtieron en surtidores de recetas, y no atendieron a nuevos casos.
“Ibas por tu receta y te devolvían a su casa. No se hicieron durante dos años exámenes de carga viral y para saber si el medicamento estaba funcionando. Durante dos años no se les tomó la presión, signos vitales, tampoco tratamiento psicológico ni nutricional. No hubo atención a los nuevos casos, no se hicieron pruebas de detección oportuna, no recibían los Capasits a nuevas personas, solo se les daba tratamiento a personas ya registradas y así fue durante dos años.
Comentó que incluso si una persona con VIH necesitaba cualquier cirugía, no la recibían en los hospitales porque se convirtieron en hospitales covid.
Por ello, insistió en que el mal manejo de la atención a pacientes con VIH y sida en el estado de Veracruz ha provocado las altas cifras de mortalidad.
