Fideliña en el PVEM
Instituida en el argot político veracruzano por el gobernador Fidel Herrera como peculiar forma de hacer las cosas, fintando, cabeceando, diciendo que sí pero al mismo tiempo haciendo todo lo contrario, la “fideliña” no ha desaparecido, se ha transformado y evolucionado y anida enquistada en la manera de hacer política de quienes tutelan y administran al PVEM… Sin la chispa ni la inteligencia del ex gobernador de Nopaltepec, su vástago y heredero político, el secretario de Organización del PVEM, Javier Herrera Borunda, al parecer se la aplicó a la depuesta secretaria General del partido, Eleaney Sesma, utilizando a personeros de muy baja estofa, probada incompetencia y deficiente capacidad de administración, que llevó a este partido a recibir multas del órgano electoral por más de 27 millones de pesos… Así, mediante una especie de golpe de estado con un tufo porril, le dieron sabadazo a Eleaney y en una maniobra muy extraña no solo le notificaron de la manera más informal posible mediante un raro documento su destitución sino que le negaron su derecho de audiencia… En su lugar, la dirección nacional del verde, volvió a acomodar a Marcelo Ruiz Sánchez, antecesor de Eleaney, quien a su paso por la dirigencia estatal se le hizo bolas el engrudo, irregularidades le llaman, y por no ejercer una correcta administración de las prerrogativas ni cuadrar bien su libro de gastos del periodo 2020, el INE le aplicó una reducción de alrededor del 25% de las prerrogativas mensuales de ese partido hasta que sean resarcidas todas ellas… Es decir, el Consejo Político nacional verde no sólo restituyó la dirigencia a Ruiz Sánchez –culpable del manejo desaseado de los dineros–, le pretende absurdamente etiquetar la responsabilidad a Eleaney y le negó un legítimo derecho que le corresponde a quien consolidó una estructura electoral y de activismo político del cual carecía la organización que tiene como emblema al tucán… A menos que los jerarcas tucanescos quieran darle la oportunidad a Marcelo para que limpie su cochinero, no hay explicación lógica a la remoción de quien fuera la única dirigente partidista del género femenino en Veracruz y que ha actuado de una manera limpia y transparente en una trayectoria por más de siete años en sus filas… Por si no fuera suficiente, Eleaney ha recibido el maltrato de la gente ligada a Marcelo, quienes tras la destitución fulminante, facciosamente le negaron el acceso a las que fueran sus oficinas… En vía de mientras y ante la arbitrariedad que representa la “fideliña”, la periodista misanteca interpuso una querella ante el Tribunal Electoral de Veracruz que además de la irregularidad de su destitución y las evidentes fallas del dictamen interno del Verde, que le negó su derecho de audiencia, argumentó violencia de género por la manera en que fuera tratada por Ruiz Sánchez y asociados, situación notable proveniendo de un órgano partidista que presume defender la violencia política en razón de género y favorecedor de la paridad sustantiva… No es creíble además que tal decisión no haya sido tamizada en el CEN tucanesco por el influyente veracruzano, amigo cercano del propietario de la franquicia, Manuel Velasco Coello. Ya se verá pronto que es lo que en verdad hay detrás de la toma del partido y la reinstalación del jovenazo Marcelo…
