Los integrantes del Movimiento de Resistencia Civil La Leyenda de Chucho el Roto están a la espera de renovar las mesas de trabajo y de diálogo con el nuevo gerente general de la División Oriente de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para entablar negociaciones en beneficio de la ciudadanía.
Lo anterior fue señalado por el vocero y secretario general de la organización mencionada, Jorge Morales Barradas, quien aseguró que estas mesas de negociación están suspendidas por el cambio de gerente, por lo que se espera que el recién nombrado atienda esta temática y se dé respuesta a la demanda generalizada de usuarios de la zona costera de la entidad: la reclasificación de las tarifas de energía eléctrica.
Consideró que el nuevo titular de la División Oriente de CFE lo retome, porque “hay varios temas que son importantes para la paraestatal y también para la ciudadanía, y es eso lo que se busca, que la ciudadanía esté tranquila y reciba la atención adecuada por parte de CFE, hasta para poder hacer un contrato que haya buena atención”.
Añadió el dirigente social:
“Que haya esas ampliaciones de red eléctrica, que coordinemos esta situación, porque nosotros seguimos en esa insistencia de la reclasificación de las tarifas eléctricas”.
Mencionó que hasta el momento no ha habido un acercamiento con el nuevo titular de CFE División Oriente, pese a que ya se le entregó un documento en donde se le expresa esta preocupación:
“Queremos regresar a las mesas de trabajo y ojalá antes de que concluya el presente mes se lleve a cabo dicha reunión”.
Por otro lado, mencionó que los actos de hostigamiento por parte del personal en contra de los usuarios siguen, derivado de las acciones que la CFE implementa; “nosotros hemos mantenido la postura y se les ha manifestado a los trabajadores que dejen de cometer actos arbitrarios en contra de las familias y que las dejen de hostigar”.
Expresó que estas acciones pueden caer en ilegalidades, pues los usuarios no son notificados con días de anticipación para revisar el medidor o ir a visitar a los domicilios, no nada más que lleguen arbitrariamente y corten el suministro del fluido eléctrico o revisen el medidor, sin ninguna orden ni notificación a los usuarios.
