Coatzacoalcos, Ver.- El estado de Veracruz se ha convertido en un embudo para los indocumentados; los elementos del Instituto Nacional de Migración (INM) los detienen, les quitan sus cosas y los regresan a Tabasco y Chiapas para evitar que avancen hacia Ciudad de México.
Un grupo de venezolanos y hondureños llegaron a Coatzacoalcos este jueves en su intento de avanzar hacia el centro del país. Señalaron que ya habían llegado hasta los límites entre Puebla y Veracruz, pero fueron detenidos por elementos de Migración, quienes los mantuvieron privados de su libertad en una especie de cárcel y después los trasladaron en autobús hasta Villahermosa, donde finalmente los soltaron.
José Alberto Cotero, uno de los originarios de Venezuela, refirió que salió hace cuatro meses de su país pero lleva un mes y medio tratando de salir del sureste de México, pues ha sido detenido en varias ocasiones y lo regresan.
Él viaja con su hermana, su cuñado y sus sobrinos; apenas este jueves en la madrugada “los dejaron libres” en Villahermosa e inmediatamente empezaron a caminar para continuar hacia la Ciudad de México, donde esperan abordar el tren hacia el norte del país.
Denunció que los elementos de Migración les quitaron dinero y sus teléfonos celulares, además de que no les dieron comida ni atención médica, a pesar de que el bebé de cuatro meses que viaja con ellos sufre un cuadro de enfermedad respiratoria.
Relataron que durante todo el viaje han tenido que ir pagando para pasar las zonas más peligrosas como el llamado “tapón de Darién”, pero en México es donde más les han robado y les impiden avanzar hacia Estados Unidos.
Tras 12 horas de camino, las familias migrantes se instalaron en el parque central de Coatzacoalcos para descansar un poco, buscar algo de comida y seguir su camino, pues aseguran que lo van a seguir intentando hasta lograrlo.
En total fueron detenidos cerca de 60 migrantes que caminaban por diferentes puntos de la entidad, por lo que ahora esperan alcanzar alguna de las caravanas para evitar más percances.
