Desde 2020, cuando se registró el inicio de la pandemia por covid-19, los colectivos dedicados a la defensa de los derechos de la diversidad sexual no se han reunido con la fiscal general Verónica Hernández Giadáns en las mesas de trabajo que se realizaban para darle seguimiento a los crímenes de odio en la entidad.
El presidente de la Coalición Estatal LGBTTTIQ, Benjamín Callejas Hernández, lamentó que no haya interés de la fiscal para atenderlos, a pesar de que el estado se ubica en los primeros lugares de crímenes de odio a nivel nacional, con 26 tan solo en 2022 y un acumulado de 473 desde de 2016.
“No les interesa sentarse con nosotros. La fiscal está mal informada; nosotros como coalición no somos su enemigo pero ellos lo han tomado así porque hemos visibilizado la problemática”, dijo.
Comentó que en 2021 su organización solicitó de manera formal la restitución de las mesas de trabajo para darle seguimiento a los casos, pero hasta ahora no ha recibido respuesta.
“Desde 2020 no tenemos reunión con la fiscal. La última se hizo con la directora de Unidad y Género y se presentó la fiscal. Quedamos que íbamos a seguir con los trabajos pero se vino la pandemia y desde entonces no hemos tenido acercamiento. Volvimos a hacer una solicitud en 2021 para que se reabrieran las mesas de trabajo pero no he recibido respuesta”.
Consideró como una burla de las autoridades que intenten minimizar los crímenes de odio mientras dan informes que no están basados en la realidad.
“Mientras ellos dan informes de que no pasa nada en el estado la realidad es otra (…) Es una burla que traten de minimizar esta situación no solo por las víctimas sino por sus familias”.
Dijo que las autoridades ven a los colectivos y activistas como enemigos a pesar de que su intención es visibilizar la problemática y buscar los medios de frenar los crímenes contra miembros de la diversidad sexual.
“Eso es lo que no les gusta, que estemos señalando porque ellos dicen que la problemática no es tan grave, pero a nosotros nos pega y nos lastima”.
