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Chamanismo y prácticas esotéricas de la zona de Catemaco luchan contra la mala publicidad

El chamanismo es una práctica ancestral de hechicería y magia, surgida en las tribus indígenas. El chamán, especialista en lo sagrado y dotado de ciertos dones y condiciones especiales, hace de puente entre el mundo real y el mundo invisible o intangible. 

Erick Coyote Negro, chamán de Catemaco, señaló que aunque se recurren mucho a ellos en Veracruz, hay desconocimiento alrededor del término chamán, e incluso se le da una “publicidad oscura”. Regularmente los buscan como luego se dice: “tras bambalinas”. 

Explicó que actualmente muchas personas recurren a los especialistas en materia esotérica para que les ayuden mediante un ritual para mejorar su suerte, quizás leer su futuro o incluso encontrar el amor, y uno de los tipos de encantamientos que más les solicitan es el amarre de amor. 

Señaló que los amarres son de dos tipos, están los que son para conseguir matrimonio, que más que nada se enfocan en dirigir la energía natural para ayudar a una persona a encontrar el amor, así como aquellos amarres dirigidos a una persona, regularmente por parte de su pareja, y cuyo objetivo es que los sentimientos de amor y deseo carnal se fortalezcan. Es habitual que el contexto en que se practican estos últimos amarres sea cuando una persona está preocupada porque su pareja ha cambiado de actitud, se distancia, o bien acaba por abandonar la relación. 

Destacó que los amarres de amor son usados para promover el fortalecimiento de energías positivas, como es en este caso el amor, con ello, representan un tipo de magia blanca, esto según especialistas en la materia. 

Doblegar la voluntad de otra persona no es el objetivo de un amarre, ya que no hay amor en hacer esto. Por lo general, se pide que la persona que solicita el amarre tenga verdadera fe en el proceso, se le puede solicitar una foto, prenda, cabello u otros objetos asociados a quien va dirigido el amarre. 

Además, recordó que en el mundo de las ciencias ocultas existen siete magias, sin embargo, cuatro son las más usadas por chamanes y creyentes, se trata de la magia negra, blanca, verde y roja, y cada una se utiliza dependiendo del caso de la persona y el trabajo de hechicería que se requiera hacer. 

La magia blanca está relacionada con el amor, es utilizada para unificar y crear paz, pero también para endulzamiento y dominación de las parejas; es decir, utilizada para que esposos dejen de golpear a sus parejas y las traten mejor, o para calmar el humor del ser amado y evitar el rompimiento. 

La magia negra está relacionada con lo oscuro y entidades del bajo astral, es decir, entidades relacionadas en la creencia popular con el demonio. 

En ésta se llevan a cabo rituales de vudú y hechicería, para enfermar a personas e incluso llevarlas a la muerte. En Catemaco, estos rituales se practican en un lugar conocido como Cueva del Diablo. 

En cuanto a la magia verde está relacionada con el uso de herbolaria y la madre naturaleza. En esta magia no se hacen hechizos ni se invoca a ninguna deidad. Se basa en el uso de elementos naturales, principalmente plantas, para hacer limpias y pedir a la naturaleza su protección a través de su energía. 

Respecto a la magia roja también está relacionada con el amor, y sirve para llevar a cabo endulzamientos hacia la pareja, sin llegar al amarre, invocando al poder de una deidad llamada Blanca de las Palmas, quien es una mujer parecida a la Santa Muerte, que es una entidad de alta astral, comenta.

En esta magia se usan veladoras, inciensos, aceites, loción que recibe una curación a través de oraciones especiales, comenta el brujo de Catemaco, quien deja claro que la efectividad de cada magia también dependerá de la fe de la persona creyente.

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