Catemaco, Ver.- Una estrella de cinco picos dibujada en el piso e iluminada con veladoras, un saludo a Ometeotl (Dios de la dualidad) y el sonido de caracoles fue el inicio de la misa negra para recibir el primer viernes de marzo en este Pueblo Mágico encumbrado en la región de Los Tuxtlas.
En el centro ceremonial “El Ahijado” se celebró la décimo segunda edición de la Misa Negra ofrecida por el brujo mayor, Enrique Marthén Berdón, en donde se concentraron más de 200 personas para ver y ser partícipes del sacrificio de animales a la deidad del señor de las moscas: Belcebú.
En los primeros minutos del viernes brujos de Catemaco se reunieron, todos con ropa color negra, con collares y dijes de la Santa Muerte.
Antes de la misa negra, un grupo de danzantes bailaron al ritmo de los tambores e hicieron sonar los caracoles que llevaban en los tobillos y muñecas.
En la misa negra, una pareja de jóvenes llevó un chivo color negro para que el brujo mayor lo sacrificara y la sangre la ofreciera a Satán.
El brujo especificó “entregan estas dos ofrendas, consagramos totalmente estos seres para que nos brinden vida, para que nos brinden poder, que limpien nuestro cuerpo con su sangre, que limpien nuestro interior y exterior de cada uno de nosotros aquí presentes como participantes de la misa negra”.
Además de Enrique Marthén, en Catemaco hubo otros personajes que celebraron misas negras, como “El Indio Negro Brujo Mayor” y otro más que también dice llamarse “Brujo Mayor”.
La celebración de las misas negras forma parte del misticismo que por décadas ha caracterizado a Catemaco cada primer viernes de marzo en el que se dan cita por lo menos cuatro mil turistas.
Sector Salud exhorta a no ingerir brebajes
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz Norte recomienda a la población en general en tener precaución con las prácticas alusivas al primer viernes de marzo; evitar la sugestión y el consumo de brebajes, pues, aunque es importante preservar sus creencias, no se debe poner en riesgo la salud.
“Algunas personas buscan soluciones a sus padecimientos en la cura alternativa, en la llamada brujería o esoterismo; sin embargo, esto puede conducir a la depresión y a la paranoia, pues al no ver mejoría, las personas siguen creyendo que algo o alguien les causa un padecimiento”, explicó la coordinadora médica de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) 61, Karla Fabiola Díaz Rodríguez.
En este sentido, Díaz Rodríguez invitó a la población a evitar el consumo de brebajes, pues muchas de las veces contienen alimentos crudos o sin un proceso correcto de preparación e higiene; de igual manera mencionó que las personas con enfermedades crónico degenerativas no pueden practicar ayunos prolongados.
Además, la coordinadora médica añadió que no se dejen engañar por falsos remedios que contengan escopolamina; la escopolamina es una droga alucinógena que se encuentra presente en plantas como la belladona, mandrágoras y trompetas de ángel, entre otras.
“Dichas plantas pueden tener efectos peligrosos en el cuerpo, incluyendo la pérdida del sentido de la realidad; así como una disminución de la secreción glandular, produciendo sequedad de piel, sed, dificultad para deglutir y hablar, entre otros síntomas; incluso, su uso puede tener consecuencias graves para la salud”, explicó.
Igualmente, la especialista agregó que las personas deben tener cuidado de no dejar encendidas velas o veladoras en las noches o cuando no hay nadie en casa para evitar incendios, pues es una práctica muy común para los rituales de fortuna o salud.
Para finalizar, recomendó a la población cuidarse, acercarse a su UMF en caso de ser necesario y no dejarse influenciar, para realizar prácticas que pudieran poner en peligro su salud tanto física como mental.
