Orizaba, Ver.– En el municipio de Tehuipango, las asociaciones de padres de familia y los consejos de participación social, conformados por los habitantes de este municipio, pusieron en jaque a la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), pues este lunes cerraron 50 escuelas de diversos niveles educativos para presionar a la dependencia y lograr que se cubran las plazas magisteriales vacías, y así combatir el retraso en los planes educativos.
Tehuipango es un municipio enclavado en la sierra de Zongolica y de acuerdo a los datos más recientes del Inegi, se encuentra en el listado de los diez municipios más pobres del estado y del país. Este lunes, padres de familia se cansaron de esperar la respuesta de la SEV para cubrir plazas magisteriales vacías desde hace semanas, y decidieron cerrar los accesos a por lo menos 50 planteles que se ubican tanto en la cabecera municipal como en las congregaciones que la conforman.
La falta de maestros no es una situación nueva, ya se había informado a la autoridad correspondiente por la propia delegación de la SEV, pero hasta este lunes no ha sido atendida y muchos menos resuelta.
El movimiento detonó tras la salida de un maestro de la telesecundaria de este municipio, quien, al parecer fue removido de su lugar de trabajo por órdenes del supervisor escolar, a quien los padres de familia acusan de negarse a cubrir las plazas vacantes que al parecer son muchas. Eso provocó que los padres organizaran este movimiento.
Lo que ellos piden, señaló Ramón Tepole, docente de educación indígena, es que haya maestros en las escuelas de la zona, porque hay docentes que obtienen su cambio de lugar de trabajo, se van, pero la SEV, no cubre la plaza vacante.
En ambos casos, las quejas han sido presentadas a la autoridad correspondiente, pero no han sido atendidas, afectando a la población debido a que se ha perdido parte del aprovechamiento escolar y perjudicando aún más a los alumnos, quienes deben enfrentar las condiciones de marginación y rezago que hay entre la comunidad estudiantil.
Pero mientras eso sucede en Tehuipango, en la zona urbana también hay quejas, pues los padres de familia de la escuela Francisco Javier Clavijero, se apoderaron de las instalaciones y exigen la destitución de la directora a la que acusan de malos manejos administrativos.
