Con la ausencia del alcalde de Xico, el morenista Luis Yoval Maldonado, se efectuó la Xiqueñada 2022, festividad en honor a Santa María Magdalena, la cual dejó diez lesionados, dos de ellos de gravedad; la fiesta del pueblo se hizo luego de suspenderse dos años debido a la contingencia sanitaria por covid-19. En esta ocasión, según las autoridades municipales, tuvieron una afluencia superior a los 25 mil asistentes y una derrama económica estimada a los 5 millones de pesos.
De acuerdo con el informe que rindió el consejo coordinador del operativo de seguridad, dos de los heridos fueron atendidos en el lugar y no requirieron ser llevados a un hospital; sin embargo, uno de ellos fue trasladado al Hospital Civil de Coatepec.
El cuarto lesionado es un joven que sufrió heridas de consideración al ser corneado por el toro, por lo que fue trasladado al Hospital Civil de Xalapa, donde su estado de salud fue reportado por los galenos como delicado, pero estable.
En total fueron 18 toros de lidia, los cuales fueron saliendo de manera intermitente en punto de las 12 horas, luego que, desde la explanada de la iglesia, se lanzaron tres cuetes que daban inicio a la suelta de toros, que concluyó a las 13:45 horas la tradicional Xiqueñada, actualmente llamada Capea de Toros.
A pesar que las autoridades del ayuntamiento de Xico insistieron en que se reguló la venta de licor, ésta fue desmedida, además que las gradas llegaron a costar hasta 500 pesos, aunque el director de Desarrollo Económico del municipio indicó que costaban entre 100 y 200 pesos.
En la Xiqueñada se observaron turistas extranjeros, principalmente de Canadá, Estados Unidos, Colombia, Argentina y España; además de visitantes nacionales, como Puebla, Tlaxcala, Guadalajara y San Luis Potosí.
Efraín Galván González, coordinador de atención prehospitalaria para las fiestas de Xico, expuso que los cuatro heridos son hombres y que sólo dos de ellos requirieron hospitalización. “De esos cuatro lesionados dos eran foráneos: uno originario de Huamantla (Tlaxcala) y otro la ciudad de Coatepec y los otros dos que no ameritaron el traslado son originarios de Xico”, expresó.
En ese sentido funcionario municipal destacó que los heridos, principalmente el de mayor gravedad presenta, se encontraba en estado de ebriedad y corresponde a un persona que no se registró para la capea, es decir, que saltó de las gradas a la suelta de toros.
Alcalde de Xico, ausente
En conferencia de prensa, donde estuvo ausente, al igual que en la festividad, el alcalde Luis Yoval Maldonado y el cuerpo edilicio, se dio a conocer que en lo que va de las festividades de Xico, suman 10 personas lesionadas, entre ellos dos que sufrieron un accidente automovilístico en la colonia Emiliano Zapata.
“Ya con los lesionados al día de hoy, tenemos aproximadamente 10, de los cuales lamentablemente dos sí fueron de gravedad al sufrir un accidente automovilístico y los otros han estado estables o con quemaduras de primer y segundo grado por la quema de pirotecnia”, precisó Efraín Galván González, coordinador de atención prehospitalaria de Xico.
Indicó que en el caso de los heridos, la mayoría se encontraban en estado de ebriedad, situación que se le cuestionó por la venta desmedida de licor en las fiestas patronales. “Sí hubo una regulación en las ventas, únicamente tienen permitido los que ya tienen un permiso previo (…) a los participantes de la capea tienen restringido ingresar en estado inconveniente. La persona que resultó lesionada no formaba parte del registro”.
En ese sentido indicó que se registraron a próximamente 600 participantes a la suelta de toros, quienes esperaban a que el toro saliera de la jaula, aunque en algunos casos a los animales fueron agredidos al arrojarles vasos de cerveza o botellas de agua.
A las 16 horas inició la corrida de toros en la plaza del municipio, donde el acceso tenía un costo de 350 pesos y se restringió el ingreso de cámaras profesionales; a las 10 de la noche se llevó a cabo el baile popular en el parque central de Xico, a un costado de la iglesia.
Venta desmedida de alcohol
Antes de la suelta de toros, con motivo de la fiesta patronal a Santa María Magdalena, la venta de licor, principalmente morita, torito de cacahuate y cerveza, se realizó de manera desmedida.
Al caminar por la calle Miguel Hidalgo, pocos eran los asistentes que no se encontraban ingiriendo bebidas alcohólicas, situación que destacó y dejó a un lado la tradición del festejo a Santa María Magdalena.
No eran ni las 5 de la tarde, cuando se podía observar sobre la calle a personas tiradas en el suelo en estado de ebriedad; algunos turistas aprovecharon para tomarse selfies con estas personas que se encontraban pasadas de copas.
De igual manera no hubo ningún tipo de restricción en cuanto a los cuidados para evitar los contagios de covid-19, ya que los asistentes no usaban cubrebocas a pesar de las aglomeraciones.
