Rafael Delgado, Ver.- Desde el asesinato de Isauro Ambrosio Tocohua el 30 de diciembre, el municipio de Rafael Delgado permanece acéfalo, pues el Congreso del Estado ha retrasado el nombramiento de la suplente del alcalde; esto ha provocado un rezago en los servicios municipales e incluso el pago de salarios está en riesgo debido a que en las cuentas bancarias aún aparece el nombre del munícipe ultimado.
Al temor por la violencia, se le suma la incertidumbre entre los empleados del ayuntamiento, pues prácticamente las labores en las todas las áreas están detenidas. Los trabajadores y algunos directores de diversos departamentos dicen desconocer por qué el Congreso del Estado no ha llamado a Alejandra Enríquez Ortiz, presidenta municipal suplente, para asumir el cargo y restablecer la normalidad en la prestación de los servicios básicos.
Sin embargo, trascendió que Alejandra Enríquez no quiere asumir el cargo para el que también fue electa por la violencia en este municipio.
En abril del 2022, Juan Carlos Hernández Cortés, subdirector de gobernación municipal y su escolta fueron asesinados a tiros en plena cabecera municipal; cuatro meses después Víctor Padilla Camarillo, sobrino del ex alcalde Arturo Camarillo Ramírez fue ultimado a balazos. Ambos casos permanecen sin resolver, el momento la Fiscalía General el Estado (FGE) no ha informado sobre avances.
El viernes, el presunto autor material del asesinato del alcalde, según informó el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, fue abatido tras enfrentarse a tiros con elementos de la policía estatal, quienes repelieron un ataque tras intentar detenerlo por características sospechosas.
En el palacio municipal priva la incertidumbre sobre el rumbo que tomará el gobierno, debido a que no hay quien coordine las actividades y en el Congreso del Estado no hay fecha para que los legisladores sesionen y se acuerde llamar a la suplente del alcalde o en todo caso la síndica Norma Reyes Sánchez asuma el cargo.
