Eduardo de la Torre Jaramillo manifestó que la marcha convocada por organizaciones civiles para este domingo 26 busca defender el sufragio popular y es un claro mensaje al Poder Judicial de la Federación para que frene la reforma electoral aprobada por la Cámara de Senadores que tiene los visos, opinó, de ser fascista.
Respecto del Instituto Nacional Electoral (INE), aventuró que es la única institución que garantiza el respeto pleno al voto, el acceso a la democracia y que hay un árbitro autónomo.
Arguyó que se busca defender el sufragio popular “porque es el único valor que actualmente tienen los ciudadanos, ya que el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) pretende regresar al pasado a fin de mantener el control del instituto.
Organizaciones “civiles” relacionadas con personajes de la oposición y de la política convocaron a manifestarse contra el llamado “Plan B” de la reforma electoral que impulsó el presidente y que fue aprobado por el Senado el jueves y se está en espera de su promulgación para que entre en vigor.
El ex panista y ex militante del Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina sostuvo que el voto se convirtió en un valor para los ciudadanos y desde que el INE se conformó como un organismo autónomo se empezó a igualar la competencia electoral.
Precisó que entre otras cosas, la reforma electoral impulsada por Morena va por la desaparición de las juntas distritales del INE al pretender desmantelar totalmente la estructura del instituto. “Hay la propuesta es desaparecer 40 y tener solo 260 oficinas temporales”, añadió.
Expuso que también se eliminarán los vocales de capacitación y organización que son los ejes del proceso electoral y hay un total desconocimiento de cómo operará la institución que estará a cargo de la organización y realización de los procesos electorales.
“No hay que permitir que se desmantele el INE y regresar a los años donde el partido-gobierno tenía el control de todo y decidía quién ganaba o quién competía, sin darle mucho valor al voto de los ciudadanos. Estamos frente a un grupo en el poder que no hace caso, que no escucha, que no tiene la menor posibilidad de hacer política”, dijo.
“La marcha del domingo es un mensaje al Poder Judicial para que frene la reforma electoral que tiene todos los visos de ser una reforma fascista”, concluyó.
