Dinero Tropical
Por José Hernández Herrera
Empecemos por recordar algo: México es una economía muy grande a nivel global. ¿Por qué digo lo anterior? Pues porque México, según datos del Fondo Monetario Internacional, se encuentra en las 15 economías más grandes del mundo.
Si, es cierto, somos una economía muy importante, pero no empecemos a cantar desde ahora El Cielito Lindo, esto tiene mucho sentido porque también somos de los países con mayor población a nivel mundial y, también, esto si es para festejar, nuestra economía ha experimentado una mejora institucional desde hace décadas que nos hace estar cada vez mejor posicionados ante las grandes economías.
Ahora bien, estos datos sorprendentes también tienen cifras exorbitantes y nada positivas como nuestra deuda pública que actualmente asciende a casi 15 billones de pesos.
Es muy probable que este dato no genere mayor reacción porque un dato sin contexto no tiene mayor significado. Sin embargo, para dar mayor claridad, ese dato representa para el 2023 el 46.8% de la deuda en comparación con el Producto Interno Bruto de ese mismo año.
Afortunadamente aún se puede poner mayor contexto ¿qué interpretación se puede hacer de México acerca de esa deuda del 46.8% en comparación con su PIB?
Pues bien, según el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, el porcentaje de la deuda pública en comparación con el PIB es uno de los estándares más importantes para medir las finanzas públicas de un país a nivel internacional.
La buena noticia para México es que el año pasado se tuvo un porcentaje de deuda del 47.6%. con relación a su PIB. Esto significa que para el año 2023, la deuda disminuyó 1.2 puntos porcentuales.
En resumen, nuestra deuda aumentó, pero el buen desempeño de nuestro Producto Interno Bruto hizo que esta deuda en porcentaje disminuyera.
¿Cómo podría explicar y aplicarse lo anterior para mi dinero tropical?
Imaginemos a un veracruzano que gana 12,000 pesos al mes. Tiene un empleo agradable y también tiene la mentalidad de mejorar en su trabajo. Para su buena fortuna, el trabajo le brinda posibilidades de mejora y, al mismo tiempo, de obtener un mejor sueldo si los resultados de su trabajo demuestran beneficio para su empresa.
Sin embargo, este mismo veracruzano tiene la costumbre de adquirir préstamos para ciertas compras. Ya saben, pidió un refrigerador en una tienda de esas que ofrecen pagos en cuotas pequeñas y, en resumen, debe pagar 1,200 pesos al mes para cumplir con los pagos a tiempo y evitar que los intereses se acumulen.
Si hacemos unos cálculos básicos, nos daremos cuenta de que este veracruzano destina un 10% de sus ingresos mensuales para pagar sus deudas.
Para el próximo año, siguiendo con esa mala costumbre de solicitar productos a créditos, este veracruzano ahora tendrá que pagar una deuda de 1,400 pesos al mes. Sin embargo, como mencionamos anteriormente, para su buena fortuna, ha obtenido buenos resultados de ventas en su empresa, por lo que ahora gana 16,000 pesos. 4000 pesos más que el año anterior.
En primer lugar, seamos insistentes, no es una buena noticia que esté generando más deuda que el año pasado porque ese estilo de vida con deuda es potencialmente dañino para las finanzas de una familia, empresa o país. Sin embargo, en términos generales, la deuda ahora representa el 8.75% de sus ingresos mensuales.
¿Qué sucedió?
La deuda es un número que no se puede interpretar sin una referencia. En este caso, la referencia es el sueldo de alguien. Si alguien mantiene una deuda igual que el año anterior, pero ahora gana menos, su porcentaje de deuda será más grande debido a la simple disminución de ingresos.
En caso contrario, como el ejemplo del veracruzano, si su ingreso aumenta, aunque la deuda aumente un poco, al final representa menos que el año pasado debido a los ingresos mayores. En el caso del veracruzano, sus ingresos aumentaron un 33.3% y su deuda un 16.6%.
En conclusión, la deuda se puede vencer de tres formas.
La primera puede vencerse simplemente disminuyendo su cantidad.
La segunda forma de abordar la deuda, al igual que México en estos tiempos, es generar más ingresos cada año y mantener esa deuda manejable para que sea más fácil de atacar.
La tercera es una combinación de las dos anteriores. Disminuyes tu deuda y al mismo tiempo aumentas ingresos para poder liquidarla con mayor rapidez.
