El dictamen de la Comisión de Vigilancia del Congreso del Estado va en el sentido de no aprobar la Cuenta Pública 2021, confirmó el presidente del grupo de trabajo, Rafael Fararoni.
El legislador compartió que se dará un plazo de 90 días al Órgano de Fiscalización Superior (Orfis) para hacer una nueva revisión y solventar las observaciones que algunos ex alcaldes ya presentaron. El dictamen será remitido al pleno el lunes 24 de octubre, quien tendrá la última decisión.
“Es del dictamen de la Comisión, eso hay que dejarlo en claro, falta la discusión en el pleno que es el que gobierna a los diputados. La Comisión propone 90 días a partir de que se discuta. La idea es que se haga una Cuenta Pública bien hecha, que si sale un peso o 3 mil millones de pesos se finquen responsabilidades administrativas o judiciales”.
En el lapso de 90 días, los entes fiscalizables podrán solventar la documentación que haya que subsanar, esto ante las inconsistencias expuestas por al menos 20 personas entre ex ediles y actuales autoridades municipales, respecto a que no fueron tomados en cuenta sus documentos dentro de la muestra del organismo fiscalizador.
El diputado local indicó que esta decisión de la Comisión no significa otra cosa más que mejorar el trabajo que desempeña el organismo fiscalizador en beneficio de la población veracruzana y añadió que la votación de este dictamen será antes de que finalice el mes de octubre.
“Tampoco vengo a decir que traemos un hacha para decir que todo está mal, se hizo una muestra donde hay ciertas inconformidades de varios diputados y vemos sano que lo hagamos, es algo que podemos hacer como diputados, tampoco nos vamos a extender otro año, el chiste es que se haga una buena cuenta”.
Aclaró que los entes que tengan alguna inquietud serán atendidos por el Orfis, como brazo técnico del Poder Legislativo, “es una mejora al trabajo, estamos proponiendo una nueva oportunidad al Órgano para mejorar su informe de resultados”, reiteró.
Congreso propone dar 90 días al Orfis para solventar pendientes de cuenta pública 2021
La contralora general, Mercedes Santoyo Domínguez, reconoció que existe una “falta de control administrativo” en las dependencias de gobierno del estado, que año con año es observado por el Órgano de Fiscalización Superior (Orfis).
La funcionaria explicó que a la fecha no ha revisado el resultado de la Cuenta Pública 2021, en donde se reportan deficiencias de la administración estatal, sin embargo, consideró que hay falta de control en el gasto de los recursos públicos y en la comprobación de cómo se invirtió el dinero.
Destacó que para ella ese tipo de observaciones no son graves, por lo que no deben ser consideradas como daño patrimonial al momento de fiscalizar los recursos públicos.
Explicó que, en esos casos, son los contralores internos los que no están haciendo su trabajo, pues el control y justificación en tiempo real del gasto es algo que se debe prevenir, es por lo que ha sostenido reuniones con ellos en las que les pide más compromiso.
“Es una falta de control. El control es de lo más complicado que existe para cualquier dependencia y para cualquiera persona, es una disciplina que se debe ir trabajando y en sistema de control interno es una buena metodología que se aplica, pero con los usos y costumbres no hemos podido, en dos años, cambiar la ideología y la manera de actuar de los servidores públicos”.
Consideró que para que se logre esa disciplina es necesario que los contralores internos tengan mayor compromiso en la revisión del manejo financiero, “y que, si no pueden, digan no puedo, y que den oportunidad a alguien más”.
Recordó que a la fecha se sancionó a un contralor interno, sin embargo, hay más expedientes abiertos y ya se han impuesto actas administrativas o sanciones no graves, como apercibimientos privados, por no dar seguimiento a su trabajo, “para tener control hay que andar atrás de los funcionarios como prefectos”.
