La fauna y flora del río Bobos, a la altura del municipio de San Rafael, resultó afectada por los desechos y aguas negras vertidas al arroyo que cruza el rancho El Aceitero, ubicado en la comunidad Nuevo Faisán, y que según autoridades locales son desechos de la empresa juguera Citrofrut.
La población de San Rafael expresó que la contaminación a los mantos freáticos es propiciada por los desechos tóxicos de la empresa procesadora de limón, naranja y toronja Citrofrut, ubicada en la comunidad de Arroyo Zarco en este mismo municipio.
Los habitantes de la comunidad Nuevo Faisán expresaron que en la noche del lunes 28 de febrero se percataron de la contaminación en el caudal, por los olores fétidos similares al del excremento.
Para las 21 horas del lunes, un grupo de hombres de la comunidad se organizaron para ir al río Bobos de donde emanaba el olor fétido y ahí se percataron que los peces y camarones se tornaron color rojo y flotaban sobre el agua sin vida.
El comisariado ejidal de Nuevo Faisán, Ciro Guzmán Pérez, expuso que desde hace dos décadas las empresas jugueras ubicadas en los municipios de Martínez de la Torre y San Rafael vierten los desechos a las ollas de oxidación, sin embargo, el líquido contaminante se va a los mantos freáticos y llega al río.
Detalló que la empresa Citrofrut tiene como propiedad el rancho El Aceitero, en el que fueron construidas las ollas de oxidación, y ahí son procesados los líquidos contaminantes.
“Lo que eran aguas cristalinas hoy son aguas negras con mortandad de peces; el líquido de las citrícolas se pudre en las ollas de oxidación, son esparcidos a través de unas bombas de agua a cielo abierto y otro tanto, lo depositan en el caudal del arroyo”, explicaron.
En voz del agente municipal de Nuevo Faisán, Óscar Hernández Platas, lamentó que el daño ecológico fue denunciado hace 20 años a las autoridades dedicadas a cuidar el medio ambiente del gobierno federal y después al estatal, pero no hay respuestas contundentes.
“El veneno de las aguas negras ya se dispersó, esta agua del río va a dar al mar, lamentablemente se han hecho denuncias, se han hecho acuerdos, se han firmado minutas, pero no hay solución, están acabando con nuestra naturaleza, nuestros peces”, comentó.
El agente municipal explicó que el arroyo contaminado atraviesa las comunidades Bella Esperanza, Arroyo Zarco, Úrsulo Galván, Vega de San Marcos, Tepetates, Galvarino Barria, Puntilla Aldama, y se une al caudal del estero de San Rafael, que pasa por Tres Encinos y Tres Bocas, para finalizar en el mar abierto en la localidad de Casitas, perteneciente al municipio de Tecolutla.
Refirieron que la contaminación a los manantiales, arroyos y río Bobos podrían ser la causa de que en la localidad de Puntilla Aldama se reporten 150 personas con males renales y otras 70 más en la comunidad de Cementeras.
El agente y el comisariado ejidal mencionaron que el ayuntamiento de San Rafael, presentó denuncias al gobierno federal y estatal de este último hecho de mortandad de peces, y están en espera de que lleguen las autoridades a tomar muestras del agua contaminada.
PMA investigará si mortandad es natural o provocada
El inspector de la zona norte de la Procuraduría del Medio Ambiente (PMA) estatal, Iván Rosales, acudirá a Nuevo Faisán para revisar la zona del río Bobos donde ocurrió la mortandad de peces, a fin de investigar si fue provocado por descargas de agua contaminada de la empresa citrícola o se trató de un fenómeno natural a causa del calor, indicó el titular de la dependencia, Sergio Rodríguez Cortés.
Adelantó que se hará un análisis del agua porque de acuerdo con las imágenes publicadas los que murieron son peces de tamaño pequeño, a los que posiblemente les faltó oxígeno a causa de las altas temperaturas de los últimos días, por el evento de surada que cruza Veracruz.
“Es una incidencia en un cuerpo de agua contaminada; además, con poco nivel de agua muchas veces el choque de calor provoca muerte instantánea a peces pequeños porque no soportan la falta de oxígeno, va a ir el biólogo a circunstanciar”, explicó.
Rodríguez Cortés aseguró que desde la PMA regulan las actividades económicas, y una de las “fuertes” en Veracruz es la extracción de cítricos como el jugo de naranja, limón y toronja a cargo de las empresas instaladas en Martínez de la Torre, San Rafael y Álamo.
Mencionó que la empresa Citrofrut no solo tiene una planta de extracción de jugo en San Rafael, también está en otros tres puntos de la entidad veracruzana y todas las industrias se han inspeccionado en el tratamiento de aguas residuales
“Hemos verificado que las empresas trabajen de manera adecuada, pero la actividad económica, como es muy grande, a veces por errores humanos o se les va, tiende a cometer daño o repercusión ambiental”.
