Orizaba, Ver.- Luz María Reyes Huerta, representante del colectivo Marea Verde Altas Montañas, acusó que el retraso en la tercera declaratoria de violencia de género muestra que al gobierno mexicano no le interesa la seguridad de las mujeres.
“Realmente el proceso de las alertas de género ha sido bastante tardado, sobre todo en esta última solicitud. (Se hizo) en mayo de 2019, estamos a cinco años y eso pone en evidencia la poca importancia que las mujeres tenemos para el gobierno”, fustigó.
Recalcó que la declaratoria es por una situación grave que se está padeciendo en el estado y criticó el “tortuguismo impresionante” por parte de las autoridades, lo que provoca que las acciones para solucionarla sean escasas, “lo vemos todos los días, muchas mujeres desaparecen, la mayoría no se encuentran y tiene que ver con el hecho de ser mujeres”.
Reyes Huerta agregó que por ello se espera que a la brevedad no sólo decreten la tercera alerta sino que también se implementen las acciones que correspondan pues, expuso, desgraciadamente se tiene una experiencia desalentadora con la alerta de violencia feminicida que se decretó, que aunque se le destinaron recursos, no se nota la disminución de la violencia contra las mujeres.
“Esperamos que en breve se decrete esta tercera alerta, no porque sea un capricho de las organizaciones que la venimos impulsando, sino porque realmente se está viviendo una situación preocupante de desaparición de mujeres. Y por supuesto también exigimos que haya acciones realmente claras, contundentes y eficaces para que se atienda esta problemática”, reclamó.
Luz María Reyes Huerta refirió que en lo que va del año dos mujeres han sido asesinadas y a, decir de ella, se trata de feminicidios.
El primer caso fue en el municipio de Rodríguez Clara, donde Zuleima Vázquez, de 27 años, fue reportada desaparecida y posteriormente fue encontrada muerta en una parcela de piñas. El otro hecho ocurrió en Soledad Atzompa, donde Gerónimo “N”, El Paco, golpeó a dos mujeres una de las cuales, María Margarita Rosales Monfil, de 56 años, falleció pese a que fue atendida en el Hospital Regional de Río Blanco. La otra agredida, se encuentra grave en el hospital de Soledad Atzompa. El Paco, el presunto responsable, escapó.
