La Secretaría de Salud el marco del Día Mundial de la Lucha Contra la Depresión, que se celebró el pasado 13 de enero, solicito que, como parte de la Estrategia Nacional Juntos por la Paz, un programa de acción específico que tenga como finalidad la atención de salud mental. Resaltó que se debe de incluir como prioridad la depresión y sus consecuencias en el desarrollo social y emocional de las personas.
Todo esto se ha suscitado ante los recientes hechos en Saltillo, Coahuila donde un joven de 12 años mató a su maestra y después se suicidó. Así mismo la pandemia generada por el Covid-19 donde el aislamiento social ha sido la causa principal de que niños y adolescentes estén experimentando estos dos terribles padecimientos.
Dichos datos muestran a Chihuahua en primer lugar, Aguascalientes en 2do y a Yucatán en tercer lugar, en donde los tres estados del país han ocurrido mas casos de suicido, así como también, en Guerrero, Veracruz e Hidalgo son los tres estados de la entidad federativa donde menos casos de suicidio se han registrado.
Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) muestran que 29.9 por ciento de personas mayores de 12 años sufren algún nivel de depresión ocasional, mientras que 12.4 por ciento lo experimenta de manera frecuente; además, que es una de las causas de las altas tasas de incidencia de suicidio en nuestro país, es decir 8 por cada 100 mil jóvenes.
Los suicidios en esta etapa del ser humano suelen ocurrir después de un acontecimiento estresante, como problemas en la escuela, el fin de una relación sentimental, la independencia en algunos casos genera soledad, el fallecimiento de un ser querido, un divorcio o un grave conflicto familiar.
Los adolescentes o jóvenes que están pensando en el suicidio tal vez hagan lo siguiente:
- hablar sobre el suicidio o la muerte en general
- dar a entender que tal vez ya no estén aquí mucho tiempo
- hablar sobre sentimientos de desesperanza y de culpa
- alejarse de los amigos o la familia
- escribir canciones, poemas o cartas sobre la muerte, la separación y la pérdida
- comenzar a regalar posesiones muy queridas a sus hermanos o amigos
- perder el deseo de participar en sus actividades favoritas
- tener dificultad para concentrarse o pensar con claridad
- sufrir cambios en los hábitos de alimentación y de sueño
- comenzar a tener comportamientos de riesgo
- perder el interés en la escuela o los deportes
Si bien no siempre es posible prevenir un suicidio, siempre es conveniente estar informado y tomar medidas para ayudar a un adolescente atormentado.
Algunos adultos creen que los niños o muchachos que dicen que se van a lastimar o quitar la vida “solo lo hacen para recibir atención”. Es importante darse cuenta de que si se ignora a un adolescente que está buscando atención, las probabilidades de que se autolesione son mayores.
