Sonreír, hacer ejercicio, comer chocolate, así como fijar metas y cumplirlas, generan una respuesta cerebral que puede identificarse como un estado de felicidad en las personas, aseguran expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En la conferencia ¿De qué depende la felicidad de los mexicanos?, los especialistas afirmaron que la felicidad no es un sentimiento, sino que se trata de un estado que se puede ir construyendo día con día, conforme se suman episodios de bienestar.
Identificar aspectos particulares, conocerse, hacer lo que nos gusta y practicar lo que mejor nos sale es la forma de generar el hábito de ser felices, señaló Beatriz Montemayor, académica del Departamento de Anatomía de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Por su parte, Manuel González Oscoy, académico de la Facultad de Psicología, explicó que existen indicadores medibles de la felicidad, entre ellos:
- Vivienda
- Ingreso
- Empleo
- Comunidad
- Educación
- Medio Ambiente
- Salud
- Satisfacción
- Seguridad
- Balance Vida-Trabajo
“Se nota cuando una persona es feliz. Lo notamos de una manera consciente, por ejemplo, en la piel, en el brillo de los ojos; muchas veces en la postura, en factores psicocorporales que muestran el estado de ánimo, a veces desde la posición de los hombros”, Subrayó el académico.
Beatriz Georgina Montemayor puntualizó que el cerebro tiene un sistema de estructura que detecta la felicidad, antiguamente llamado sistema de recompensa, que no es otra cosa más que “alcanzar la felicidad y festejarlo para que el cerebro también sepa que se está logrando el camino”.
