Cada vez que el profesor investigador del Instituto de Investigaciones en la Educación de la Universidad Veracruzana (UV), Pedro Linares Fernández, relata las agresiones y violencia que sufrieron las y los jubilados el 23 de diciembre del 2015, vuelve a sentir la indignación, el coraje y el dolor que le provocó ver a una turba de policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal golpearlos a macanazos, y empujarlos hasta derribarlos.
Ese miércoles 23 de diciembre del 2015, el profesor investigador jubilado estaba en la plaza Sebastián Lerdo, en el centro de Xalapa, con un micrófono en una mano y en la otra sostenía unos papeles en las que venía escrito el mensaje de los integrantes de la Coalición de Pensionistas Independientes del Estado de Veracruz (Copipev) para reclamar al gobierno de Javier Duarte de Ochoa el pago de sus pensiones que debieron otorgarles desde el 15 de diciembre.
En ese tiempo, refiere el profesor jubilado, contaba con 67 años, y aunque se sentía con más fuerza en su salud, no pudo defender a sus compañeras jubiladas que eran golpeadas por los policías, y solo quería gritar y decirle al gobierno del estado que parara la violencia.
“Yo solo quería llamarle a la Policía y decirles no a la violencia, nosotros estamos actuando pacíficamente, fue una mezcla de sentimientos de querer ir y detener a la Policía para que no golpeara a mis compañeras, pero no me hacían caso”, afirma parado en la plaza Sebastián Lerdo al igual que hace seis años.
Ahora el profesor investigador tiene 73 años, y cuando recuerda ese 23 de diciembre vuelve a sentir la impotencia de querer defender a sus compañeros y compañeras pero no poder; los policías cuadruplicaban el número de jubilados y eran hombres fuertes y jóvenes, nada comparado con los manifestantes en su mayoría de 65 años y más.
“A mí afortunadamente no me mermó mi salud, pero después a cada momento pensaba en la agresión; al narrar los hechos me instaló de nuevo en el momento de agresión y de ver a mis compañeras y a mi mente viene el llanto, el golpeteo y esa indignación y tristeza”.
Linares Fernández hizo un llamado a las y los ciudadanos y a las nuevas generaciones de luchadores sociales que no olviden “nunca” el 23 de diciembre del 2015, cuando el ex gobernador Javier Duarte de Ochoa incumplió en el pago de pensiones; cuando el gobernador interino Flavino Ríos Alvarado permitió que el entonces secretario de Seguridad Pública Arturo Bermúdez Zurita enviara a 500 policías antimotines a retirar de la calle Enríquez a un centenar de hombres y mujeres jubilados.
También pide al pueblo de Veracruz, que no se olvide de que el ex fiscal Luis Ángel Bravo no investigó los hechos pese a que había evidencias de la violencia ejercida por el propio Estado.
“Es algo que no se olvida y no se va a olvidar; la sociedad debe guardar este suceso lamentable en la memoria histórica para que no vuelva a pasar. Nosotros actuamos conforme a la ley, y no queremos que esta violencia vuelva a repetirse contra ningún grupo social que defiende sus derechos. Estamos aquí para recordarle al gobierno que nos debe justicia”.
