Coatzacoalcos, Ver.- El desarrollo del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT) creará grandes retos para las ciudades del sur de Veracruz, una de ellas es la disposición de agua para el consumo humano, ya que actualmente hay una fuente principal, el acueducto Yuribia; un estudio exploratorio encontró residuos de hidrocarburos poli aromáticos procedentes de la zona industrial y estiman que esto podría estar incidiendo en el incremento de casos de enfermedades renales.
El corredor industrial que abarcará cuatro polos de desarrollo depende de fuentes de agua que están en la sierra de Santa Marta, los municipios de Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaque reciben agua de la presa Yuribia, la cual se nutre de los ríos Ocotal y Texizapan.
Estos tres municipios tienen los mayores desarrollos de población, donde se estarían asentado los trabajadores que van a laborar en los polos de desarrollo de Coatzacoalcos, Texistepec y San Juan Evangelista.
En 1986, esta fuente de agua se proyectó sólo para abastecer a Coatzacoalcos, pero en los siguientes años se hicieron conexiones para otros municipios, incluyendo a Tatahuicapan, donde está asentada la presa.
De manera promedio se han utilizado 990 litros por segundo, aunque los últimos años ha bajado bastante debido a los problemas de desforestación que tiene la zona alta de la montaña, durante la temporada de lluvias se arrastran muchos sedimentos que no permiten la operación de la planta potabilizadora.
Los investigadores Lilia Albert y Lorenzo Bozada elaboraron un estudio en esta presa, se tomaron muestras de agua y sedimentos que se procesaron en el laboratorio de Epomex, en Campeche, Campeche, el cual se encuentra certificado.
En los resultados de este estudio se encontraron hidrocarburos aromáticos policíclicos, que son resultado de la incineración incompleta del carbón, petróleo, gas, madera, basura y otras sustancias orgánicas.
Existen más de 100 clases diferentes, pero 16 de ellas son denominados como “contaminantes prioritarios”, debido a su frecuencia en el ambiente y su potencial carcinógeno.
El estudio se efectuó durante la etapa de poca precipitación, cuando infieren que el viento de esta región del istmo de Tehuantepec arrastra los residuos hasta la presa Yuribia desde la refinería Lázaro Cárdenas y los complejos petroquímicos.
Se encontraron seis sustancias de la lista de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos de Norteamérica (EPA) de contaminantes y en los sedimentos se encontraron siete.
Dentro de los compuestos de hidrocarburos aromáticos encontrados en el agua están el naftaleno, acenafteno, pireno, benzo(a) antraceno, benzo (k) fluoranteno, dibenzo (a,h) antraceno en agua.
Mientras en sedimentos se detecta fluoreno y naftaleno (0.7830 ng/g), las concentraciones totales de hidrocarburos aromáticos policíclicos fueron 0.0012 ng/ml para agua y 1.2036 ng/g para sedimentos.
El estudio señala que las concentraciones de hidrocarburos aromáticos policíclicos en los sedimentos de la presa Yuribia son mayores a los determinados en agua. Esta presa actualmente tiene un problema de azolve, de los 19 metros que tenía el vaso de captación solo están en uso tres de ellos.
En el agua y los sedimentos, principalmente, se encontraron también plaguicidas organoclorados como el Endrin cetona y Dieldrin.
“El agua está muy contaminada, tenemos difenilos policlorados, hidrocarburos aromáticos policíclicos, plaguicidas, metales pesados que van desde el arsénico, el mercurio, el plomo y la pregunta que se hace uno es ¿cuál es el origen? La respuesta más factible es el transporte atmosférico desde la zona industrial hacia la presa del Yuribia, sobre todo los aerosoles que se generan en la época de secas, que caen a la presa y la están contaminando”, señaló Lorenzo Bozada.
Para el investigador, se deben ampliar los estudios, no sólo para tener más información de la calidad del agua que consumen casi 400 mil habitantes de la zona sur, sino también para investigar si esta contaminación está incidiendo en el aumento de los casos de insuficiencia renal que hay en la región sur, más allá de su origen por una falla del metabolismo por la diabetes.
Frente al desarrollo del Corredor Interoceánico consideró que ya se deben ir buscando nuevas fuentes de abastecimiento de agua para la población y la propuesta es que se tome del mismo río Coatzacoalcos, pero del área cercana a la estación meteorológica de Las Perlas, donde no hay contaminación.
Evalúan afectaciones en arroyos
Trabajadores de Pemex en conjunto con pescadores de Minatitlán elaboraron una evaluación de las afectaciones en varios afluentes provocadas por los derrames, buscan acordar beneficios para los grupos afectados.
En días pasados, los pescadores se reunieron con Vladimir Guerrero Ramírez, gerente de Desarrollo Social de Pemex en la zona sur e hicieron un recorrido por varios arroyos y ríos afectados por los derrames de la refinería Lázaro Cárdenas.
Gabriel Schultz Gordillo, dirigente de la Cooperativa de Pescadores de Minatitlán, indicó que estuvieron evaluando varios eventos que afectaron las pesquerías de toda la cuenca baja del Río Coatzacoalcos.
El funcionario tomo evidencias de las zonas afectadas por el hidrocarburo y los residuos de coque que llegan hasta esa zona, además de llevarse la evidencia fotográfica que ellos presentaron.
En esta primera etapa se hizo un primer acuerdo para la reparación del daño a siete grupos de pescadores, ya que se evaluó desde el arroyo San Francisco hasta el puente Coatzacoalcos I.
En enero se reanudarán las pláticas y se fijaron los primeros términos de los apoyos de Pemex para los pescadores.
Aunque acordaron mantener confidencial la mayoría de los términos, esperan recibir algunos apoyos para su actividad.
El líder pesquero reconoce la disposición de la empresa petrolera para resarcir las pérdidas que ellos han tenido durante los últimos años.
