sábado, mayo 11, 2024
Anúnciate aquíGoogle search engine
- Advertisement -spot_imgspot_imgspot_imgspot_img

El PRIAN, en su corrupción, se llena de orgullo

José Lima Cobos*

Era inaceptable, por un principio de orgullo, que la ministra presidenta de la Suprema Corte, Norma Piña Hernández, autorizara que la ministra Lenia Batres Guaderrama no percibiera las remuneraciones que los diez ministros restantes obtienen, pues ello daría pie y, sobre todo, los exhibiría, a que no se observa lo que señala el artículo 127 constitucional y las leyes de austeridad republicana y remuneraciones de los servidores públicos, que es el espíritu y contenido de esa disposición constitucional. Evidenciaría que los que velan y guardan ese orden legal son auténticos farsantes y saqueadores de los bienes de la nación, marcados para siempre.

Sin embargo, los dirigentes de lo que hoy se conoce como el PRIAN, constituidos por los partidos políticos nacionales que han gobernado el país, con el mínimo rubor y la desfachatez de los delincuentes de siete suelas, ni tardos ni perezosos, han dado a conocer de qué son capaces y que, además, afirman, es lo correcto en todo el mundo, pues en las alianzas electorales se convalida y se afianza hasta donde se quiere llevar en el nivel de corrupción.

Así se ha vivido en el país desde que Carlos Salinas de Gortari, en 1988 mediante un escandaloso fraude electoral, arañó la presidencia de la república y, desde ahí, en alianza con el PAN, llevaron a reformar la constitución para llegar al extremo de que todo tenía que estar en el mercado y en venta de garage. Los bienes de los mexicanos fueron enajenados a los particulares y, sobre todo, a los amigos y cómplices que ayudaron a consumar el deterioro total de la incipiente democracia y abrir el camino más amplio hacia la impunidad que se ha enraizado.

Por lo mismo, no era dable que los ministros, sobre todo su presidenta, ajustaran su conducta a los principios constitucionales. No se encuentra en su ADN. Al hacerlo, se demostraría de qué tamaño es el daño que ha sufrido la nación. Desde hace 14 años, cuando Calderón reformó la constitución para que el artículo 127 constitucional estableciera que nadie, óigase bien, percibiera mayor remuneración que el presidente de la república. No tan solo el presidente representa al Estado mexicano en su conjunto, sino que es el responsable del bienestar nacional. Aquellos que superan las remuneraciones legales contravienen los ordenamientos. Luego entonces, no puede aceptarse que otro poder incida en el presupuesto y goce de privilegios criminales que solo tienen el castigo de la justicia divina que, ya les llegará, aunque tarde. Tendrán que rendir cuentas.

Es histórico el acuerdo firmado por el PRIAN para integrar una auténtica delincuencia organizada. No tan solo hablan de minucias, como puede ser las notarías públicas, sino que incluye los baños públicos de los mercados. Allí donde las personas más pobres van a aliviar el hambre, refleja hasta dónde llegan los ominosos negocios que se reparten desde el servicio público, sirviendo para hacer grandes fortunas y elevar la bondad y dignidad de quienes nos gobiernan. El poder judicial está en entredicho, y esta era una oportunidad histórica que les llenaría de orgullo si se limitaran en su conducta.

Ya se vio que la candidata del PRIAN se deslinda de ese acuerdo de Coahuila, pero no puede hacerlo porque ella forma parte de lo mismo. Esto es, si está en la candidatura supuestamente ciudadana no es porque sea producto de una alianza de partidos, sino de los trastupijes que se hacen en lo oscurito. Luego nos enteramos, si con asombro, porque ya sabemos que arman portan, porque se les tolera y aplaude dentro de su amplia furiosa hipocresía que es digna de mejor causa.

El convenio de Coahuila del PRIAN podría tener similitud con el pronunciamiento de Cuatro Ciénegas, con el que el gobernador Venustiano Carranza se pronuncia contra los usurpadores y asesinos del presidente Madero. Solo que este tiene mucha jiribilla y tiene mucho de lo que viene y que así se legitima, como es la corrupción que es de ese tenor y, se puede decir, que “a los que no les tiemblen las piernas que pasen a firmar”. Ahí están a la vista de todos, como se puede ver a un gobernador que se retracta y los contertulios se indignan. Lo que se exhibe a continuación es la firma del acuerdo de Coahuila que condujo a que los Moreira siguieran gobernando, pero ahora será con el saqueo autorizado.

limacobos@hotmail.com x@limacobos1