Mario Mijares
El miedo es una debilidad del servidor público que le concierne a todos, mi temor concierne sólo a mí.
Parece mentira, pero nunca había escuchado a un conservador de frente por más de una hora, y no dejo de sorprenderme por la orientación de los argumentos que utilizó, pero además por el cauce que dio en su perorata final, una exposición a veces teórica sustentada, aunque al final con un sentimiento de frustración por lo que está sucediendo en este Nuevo Proyecto de Nación.
No cabe duda la importancia que tiene el que Andrés Manuel López Obrador informe todos los días lo que sucede en el país. Con un lenguaje claro explica la esencia oligarca de banqueros, industriales, comerciantes y terratenientes, quienes están en razón de la ganancia, pero además pontifica sobre el arte de gobernar, fustigando la actitud de millones de conservadores los cuales defienden formas depredadoras de poder. Sin duda, unos testaferros de clase media, adoradores de la doctrina del neoliberalismo.
Es a la luz de estos voceros trasnochados del conservadurismo quienes, utilizando semejante ideología, aplauden el modelo elitista y descalifican de manera ligera los avances sociales, pero sobre todo ejercen una suerte de anulación tanto de las acciones del responsable del Poder Ejecutivo mexicano como de la perspectiva del desarrollo de la nación. Otras veces aplaudiendo los avances de lo que se conoce como capitalismo, abriendo una brecha ideológico-social de los monopolios privados, con la rectoría del Estado del actual gobierno.
Para ellos todo está mal y estará peor, como si tuvieran una bola de cristal y conocieran el futuro; son hombres de letras, abogados y sociólogos que están seguros que ellos son los verdaderos intelectuales, e incluso dan catedra en universidades públicas como la UNAM, UV, El Colegio de México, ITAM, entre otras. No quiero pensar cómo un académico hace ideología ante una pléyade de jóvenes estudiantes, muchos de ellos moldeables, para reproducir ese nuevo tipo de intelectual.
Esta reflexión que realizo surge a la luz de que la semana pasada toqué el tema de los sociólogos intelectuales en nuestro país, quienes tienen un gran engranaje imperialista oligarca en el contexto académico nacional; representan un ogro tiránico enfebrecido que ejemplifica a la perfección la cara más deleznable de los conservadores del Mundo, y que en Jalapa Veracruz se reproduce como divisa del neopanismo y el caduco priismo actual, contra la transformación política, económica, social y cultural que en El Colegio de Veracruz estamos llevando adelante, sin cerrar las puertas a todas las corrientes teórica como ideológicas.
