Ciudad de México.- La actividad del volcán Popocatépetl ha aumentado en las últimas horas debido al ingreso de un cuerpo de magma desde zonas profundas, pero ese incremento no es diferente del que ya se ha observado en ocasiones anteriores, por lo que mientras dicho nivel no rebase los límites definidos por los expertos, por el momento solo es necesario estar atento a los monitoreos de este fenómeno, refirió Hugo Delgado Granados, investigador titular del Departamento de Vulcanología del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El experto llamó a la población civil a mantenerse informada a través de organismos oficiales y no hacer caso de información probablemente falsa que circula en redes sociales.
En entrevista con La Jornada, el especialista expuso en primer término que el Popo está en un proceso continuo de erupción desde diciembre de 1994, por lo que su actividad se intensifica o disminuye de forma continua desde ese entonces, debido a flujos de magma cuya magnitud es muy difícil calcular.
Dichos fenómenos, que también generan una deformación al volcán, no son perceptibles a simple vista, sino con instrumentos especializados, y no han llegado a niveles especialmente altos.
De acuerdo con el investigador, en este momento existen riesgos a la salud por la emisión de cenizas del Popocatépetl, ya que pueden irritar el tracto respiratorio y los ojos, además de consecuencias económicas, por el cierre de los aeropuertos, por lo que se recomienda utilizar cubrebocas y anteojos, tapar los tinacos y evitar el ejercicio al aire libre.
El especialista universitario recalcó que no es posible saber con exactitud cuánto magma está entrando al volcán ni cuánto tiempo más durará ese proceso, el cual estaría ocurriendo en los primeros 10 kilómetros de profundidad, por lo que los científicos enfrentan un grado de “incertidumbre” alto y solo pueden hacer cálculos con ciertas evidencias físicas.
Por lo anterior, Delgado Granados exhortó a la población a mantenerse atenta a la información que den a conocer las autoridades de Protección Civil, y sobre todo a no hacerle caso a datos sin verificar que circulan en Internet.