Cardel, Ver.- Cristales rotos, pintas y exigencia de justicia, así se vivió la marcha por el caso de Viridiana Moreno en Cardel, Veracruz.
Una ciudad que aunque golpeada por la delincuencia, nunca había visto una manifestación así; con tanto rencor y dolor.
El contingente pasó por las oficinas municipales del ayuntamiento de La Antigua ubicadas en la cabecera municipal, en donde pintaron puertas. “Nos falta Viri”, escribieron en las paredes, y rompieron algunos vidrios y quemaron cartones en el suelo.
También se dirigieron al hotel Bienvenido, el destino al que se dirigió Viridiana al salir de su casa el 18 de mayo, a una supuesta entrevista de trabajo. Ahí también hicieron pintas, rompieron cosas y gritaron hasta el cansancio.
Muchos ciudadanos se unieron al contingente, molestos por su desaparición y por las irregularidades que han rodeado el caso. Sin embargo, esta parte se despegó del grupo más radical de la manifestación.
El llamado siguió para las autoridades del municipio de La Antigua pero también para el gobierno estatal. Exigen investigar a fondo este caso y que cese la violencia contra las mujeres.