Orizaba, Ver.- En el denominado Día Naranja, las estadísticas indican que la violencia de género persiste y es casi mínima su reducción. Las zonas urbanas se colocan como las que más casos registran, a diferencia de las indígenas, en donde estos hechos están “normalizados”. En Nogales, el IMM atiende hechos que van desde la violencia económica hasta la física; iniciaron acciones de concientización para disminuirla, confirma Malú Sánchez Pozos, titular de ese organismo.
Al respecto, la funcionaria municipal advierte que entre la misma sociedad aún existen sectores que desconocen la violencia de género como tal, “hay personas que permanecen ajenos al tema, aunque realmente la estadística nos marca que un gran número de mujeres padecen violencia dentro de diferentes contextos”.
Por ello, agrega, “se busca concientizar y disminuir este tipo de acciones negativas. En el caso de Nogales, la estadística nos marca qué la violencia ocurre principalmente dentro del seno familiar, y en base a los mismos números, hay elevados índices de violencia económica y patrimonial que van casi de la mano con la violencia psicológica y física”.
En este municipio, “tenemos diferentes tipos de violencia, (pero) esos son los más frecuentes que las usuarias comparten con nosotros, la violencia es más común en las familias en las zonas urbanas, aunque sí hay incidencia de violencia en las comunidades.
En esas zonas, las indígenas, la violencia está normalizada, porque esto ha venido de generación tras generación, donde existe la violencia de forma normalizada”.
Frente a este problema, expone, “siempre es importante llevar a cabo acciones e informar a las mujeres con las que tenemos accesos, aunque aún nos cuesta trabajo que las mujeres nos compartan las situaciones en las que se encuentran. Aun así, ya hemos logrado interponer denuncias en la fiscalía especializada por situaciones de violencia, pero debemos ser constantes para disminuir la estadística”.
Hay niñas que también son violentadas, reconoce “pero ellas han sido atendidas por el DIF municipal, concretamente con el procurador de la familia. Hemos tenido casos graves en el tema de la violencia, pero hubo uno muy relevante de una mujer de 30 años, madre de tres niñas y además en estado de gestación muy avanzado, ella no era del municipio, se le dio la atención por la emergencia, se apoyó con su traslado a la Ciudad de México”.
Ella sufría de violencia, expone, “la pareja era mucho menor que ella, pero con adicciones, fue un caso muy complicado, por los golpes, los niños estaban en situación de desnutrición, se activó un protocolo de atención integral con psicología, asesoría jurídica, alimentación y cuidados de la salud, además para también obtener su traslado a la Ciudad de México. Ese ha sido uno de los casos más complicados que se han tenido, sobre todo por la situación de los menores”.
El Instituto Municipal de la Mujer mantiene una serie de acciones con las cuales se busca promover las acciones para detener la violencia contra las mujeres, “estamos en una etapa de concientización, emprendemos acciones que nos permiten la disminución de la estadística en situación de violencia. Nosotros consideramos que la violencia de género es un problema social grave, esa es una acción que siempre se ha promovido en el Instituto de la Mujer en Nogales y que nos ha bajado buenos resultados. Las pláticas son para concientizar a la población primero, que conozcan estos hechos”.
Asimismo, dio a conocer que en Nogales ejercen el programa para el fortalecimiento de la transversalidad para la perspectiva de género, este programa, agrega, “permite emprender acciones para el empoderamiento de mujeres, como la capacitación en transformación de alimentos, y en breve vamos ampliar estos cursos en otras congregaciones del municipio”.
