La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) informó que en la entidad dos minas se han clausurado por no contar con permisos o por el riesgo que representan a la población, mientras que dos más están en observación.
El titular de la dependencia, Juan Carlos Contreras Bautista, precisó que hay minería que compete al ámbito federal y otra al estado, en la que sí pueden intervenir.
En rueda de prensa para presentar el programa de actividades por la Semana del Medio Ambiente, comentó que los ayuntamientos estaban entregando permisos para extracción de tepezil sin ser su competencia, aunque se les puede preguntar su visto bueno ante cualquier proyecto de este tipo.
“El ámbito municipal no puede dar un permiso de minas. Hay dos tipos de minería, la minería federal, que es en su mayoría (explotación) de metales: el litio, oro, plata, cobre y demás, y la otra que es la de piedra, arena. Esa es la del estado. En este caso los ayuntamientos no pueden dar ninguna autorización”, explicó.
Esto lo mencionó Contreras Bautista al ser cuestionado sobre la situación del predio Las Lajas, municipio de Coatepec, donde la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró la extracción de piedra basáltica que un particular pretendía hacer.
“Clausuramos mina en Altotonga y en Perote porque eran de tepezil que es para hacer block pero al fin y al cabo son (excavaciones) también y ya tenían cercanía con la población. Acudimos a un llamado del diputado Paul Martínez y son las que tenemos ahorita. Fueron dos”.
Detalló que en el caso de estas mineras que extraían el material pétreo tenían casas cerca y podía haber peligro para los habitantes.
Por último comentó que se encuentran en observación algunas ubicadas en Actopan y Naolinco.
Clausuró Profepa extracción de piedra basáltica, en Coatepec
Contreras Bautista dio a conocer que recibieron tres solicitudes de tres organismos ciudadanos para dar seguimiento a la posible extracción de material pétreo en la zona de Las Lajas, en Coatepec.
Detalló que el particular contó con permisos para hacer dicha actividad en 1992 y en 2012 tramitó de nuevo la solicitud pero se le negó.
A pesar de ello, el particular, de acuerdo con las quejas interpuestas por vecinos, comenzó los trabajos y luego de una supervisión tanto de Sedema, Profepa y la Procuraduría Estatal de Protección del Medio Ambiente (PMA) se clausuró el predio.
“Estaremos al pendiente de que no exista intento de volver a explotar, en primera porque no hay autorización y porque no podemos, en este momento determinar. Se dice que hay un tema de agua, se toma en cuenta, pero tampoco hay un proyecto que nos defina que interés tienen por explotar esta zona”, concluyó.
