La rueda de prensa para fijar el posicionamiento del grupo legislativo del Partido Acción Nacional (PAN) sobre la detención del aspirante a la dirigencia Tito Delfín Cano se tornó tensa, debido a que el coordinador de la fracción, Othón Hernández Candanedo, se negó a que el vicecoordinador Bingen Rementería Molina hiciera uso de la voz.
El altercado ocurrió al final del posicionamiento, cuando Othón Hernández trató de impedir que Bingen Rementería respondiera al cruce de declaraciones entre los grupos políticos al interior del PAN, en donde responsabilizan a su padre, el senador Julen Rementería del Puerto, de traicionar al blanquiazul.
Cuando Rementería estiró la mano y tomó el micrófono para responder a los señalamientos contra su padre, Othón Hernández jaló el micrófono y volvió a tomar la palabra.
“Yo les quiero pedir un favor, el posicionamiento ya está, y los otros temas que tengamos que ver, los podemos ver allá afuera”, dijo el diputado originario de Misantla, mientras se ponía de pie y aprestaba a Bingen Rementería a dejar la sala de juntas “Manuel Gómez Morín” del Grupo Legislativo del PAN.
Los reporteros en la rueda de prensa protestaron, porque querían escuchar las declaraciones del legislador porteño, pero Hernández Candanedo cogió del brazo a Bingen Rementería para evitar que hiciera declaraciones que abonaran al encono partidista.
“Nosotros, como grupo legislativo, acordamos desde que iniciamos esta legislatura que los temas que viviéramos de aquí al 19 de diciembre, que es la elección interna, los íbamos a manejar de la puerta de este recinto hacia afuera”, insistió Othón Hernández.
El diputado local, tras quitar el microfono a Bingen Rementería, lo llevó del brazo hacia la salida de la sala para que no respondiera los cuestionamientos de la prensa. Ya afuera del recinto, en las afueras de la oficina de Rementería, éste respondió a los medios de comunicación.
Ya afuera de la sala de juntas del PAN, el vicecoordinador Bingen Rementería Molina lamentó que los Yunes los responsabilicen de la detención de Tito “N”. “No me extrañaría que los deje su mujer y organicen una rueda de prensa para decir que los dejó por culpa del senador”, ironizó el diputado local.
“La familia Yunes, creo que han perdido el control de sus emociones por completo, a partir de que nombraron al coordinador de los senadores, eso los tiene muy estresados, (…) hay una obsesión muy extraña (…) los mismos Yunes se referían sobre Tito Delfín que era del PAN rojo, que vendía candidaturas a regidores, a diputaciones, incluso decian en ruedas de prensa, en mítines, en reuniones cerradas, imagínense las tonterías que son capaz de decir (sic)”.
En ese sentido, pidió a la Fiscalía General del Estado (FGE) saber en qué año se iniciaron las carpetas de investigación en contra de Tito Delfín, ya que, si tal y como se dice datan de 2017, éstas efectivamente las inciaron los Yunes, a quienes señaló entonces como responsables de la detención del aspirante a la dirigencia estatal. “Son los Yunes, por haber iniciado investigaciones en contra de compañeros que no coincidian con ellos”, declaró.
Por último, expreso su solidaridad con Delfín Cano y su familia, y les pidió no dejarse utilizar para obtener raja política. “Les apuesto 10 a uno a que van a intentar poner a la candidata a la presidencia (de la dirigencia del PAN) a la senadora Indira, y al grupo de Cambranis y de Tito le van a dar las gracias por participar, y los van a abandonar, como abandonaron a Rogelio, como abandonaron a Goyo”, a la par que señaló que lo mismo pasará con Tito Delfín: lo utilizaron y ahora lo desecharán.
Como parte del proceso interno de Acción Nacional existe una pugna entre los grupos de Joaquín Guzmán Avilés, al que pertenecen los Rementería; así como los Yunes, que impulsan la candidatura de Tito Delfín e Indira Rosales.
El sábado 27 de noviembre arrestaron al panista en la carretera Álamo-Cazones por los delitos de fraude, abuso de confianza e incumplimiento de un deber legal; tras el evento, panista del grupo de Yunes responsabilizaron a Joaquín Guzmán y Julen Rementería de pactar con el gobierno y usar a la Fiscalía como brazo ejecutor.
