Agencias
Veracruz, Ver.- El ex alcalde de Alvarado, Bogar Ruiz, acusó a la presidenta municipal, Lizzette Álvarez, de amenazas, extorsión, robo y mal manejo de recursos públicos.
Expuso que desde el 4 de enero de 2021 ella le manifestó que iba a ser la candidata a la alcaldía por la coalición del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en alianza con el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), fórmula por la que él también llegó al poder.
Desde ese momento, subrayó, le exigió una “cuota” de 100 mil pesos mensuales para impulsar su candidatura, cantidad que le entregó y fue incrementando hasta llegar a una suma millonaria.
Agregó que durante la campaña las necesidades fueron mucho más grandes “tuve que sacar de todo lo que he ahorrado en mi vida para cumplir; en mayo yo me le quise abrir porque le dije ‘ya no puedo, ya no puedo deshacerme de todos mis ahorros’”.
Las entregas eran en efectivo en el palacio municipal o en su domicilio, en una ocasión llegó con tres personas y “me apretaron” señalando que la tenía que respaldar con dinero y con “gente”.
–¿Cuánto le entregó a la hoy alcaldesa?
–Fueron alrededor de 6 millones 100 mil, más otra cantidad que no anoté; fueron como 7 millones de pesos más o menos”.
–¿De dónde salió ese dinero?
–De todos mis ahorros, de toda mi vida, de mis negocios que yo tengo y salió de mi bolsa.
–¿No fueron recursos del erario?
–No, no fue del erario porque mi administración estaba totalmente apretada, castigada, con una retención de casi 73 millones de pesos que se iban para pago de nómina.
Bogar Ruiz añadió que en caso de que él no accediera “estaba la amenaza y conociendo como era, sus antecedentes, no quisimos fallarle momentáneamente”.
–¿Temía por su vida?
–Sí y luego con esas amenazas de que me iba a hacer llorar lágrimas de sangre la verdad es que me mantuve callado porque era muchísima la presión.
Al cuestionarle el por qué hasta ahora saca a relucir una acusación de ese tipo, argumentó que “lamentablemente” no había el acercamiento ni la confianza con el gobierno estatal y porque se sentía “vulnerable”.
Rechazó que la denuncia que ha presentado ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción sea parte de un revanchismo político.
¿Qué tipo de pruebas tiene?
“Fíjese que en una de esas, era tanto su presión y necesidad de sacar adelante la campaña que le dije que si me podía firmar unos documentos como reconocimiento para mí, interno, de lo que me había solicitado, y yo creo que la agarre no sé en qué estado, pero no muy conveniente, pero me firmó”.
Además, el dinero que ingresó a las arcas municipales el 3 de enero del 2022 (cuando ya había asumido funciones) para pagar nómina atrasada y aguinaldos del último año de su administración a personal de confianza “se lo quedó” pese a estar etiquetado para esa finalidad.
