Con las primeras luces del alba, Adrián Reyes, Mauro Reyes y Ángel Reyes salieron a la mar, pretendían ir por las redes que habían dejado una noche antes, y ganarle a los efectos del frente frío número 30, pero no fue así.
Cuando se encontraban en la zona de Playa Norte, en mar abierto, el motor de su embarcación falló, una ola los embistió y llenó de agua su lancha, que comenzó a naufragar, se pusieron los chalecos salvavidas y se abrazaron. Sólo Adrián y Mauro lograron salir.
“Él decía que se iba ahogar, yo le decía ‘aguanta, vamos a salir, vamos a salir’”, explicó Adrián Reyes, quien nadó durante más de una hora para llegar a la orilla.
Mauro, padre de Adrián, logró llegar a una cueva, en donde casi se ahoga, pero salió de ahí; ambos vieron como Ángel era arrastrado contra las piedras, donde se golpeó.
“Don Ángel tenía 54 años de edad, las necesidades que tenemos hoy en día, pescando él de toda la vida, nosotros nos echamos a la mar desde que tenemos uso de razón, así como el señor Régulo que es hermano del difunto, para nosotros es difunto, porque sabemos que no hay opciones ya para poder encontrar al compañero”, expresó Nicolás Rivera Domínguez, presidente de la Coalición de Pescadores marineros y transportistas de Veracruz.
Autoridades del puerto, la Secretaría de Marina, Protección Civil en conjunto con pescadores realizaron labores de búsqueda desde la escollera, lograron observar parte de la embarcación que naufragó, las redes que iban a quitar, pero no encontraron a Ángel.
“Era un buen pescador, nadador, es retirado de la Marina, y siempre ha sido buen compañero, es raro que él haya venido a pescar aquí así, porque él no se metía así. Pero, ni modo, le tocó pasar por esto a él”, afirmó Teresa Moreno, compañera de la cooperativa.
La familia de Ángel, su hermano y su esposa, esperaban en la orilla de la playa, noticias, sin embargo, por la fuerza de la marejada, la esperanza de encontrarlo con vida se había apagado.
Los pescadores han solicitado a la autoridad apoyo para artes de pesca, embarcaciones y motores, porque tienen más de 12 años sin recibir apoyo para los mismos, y la actividad ya no les deja ganancias como antes.
